El perfil de un futbolista nunca se ha caracterizado por tener una gran estatura y, aunque en los últimos años han proliferado jugadores especialmente altos, no se acostumbra el aficionado a ver auténticas torres en sus equipos. Es lo que sucede con el último delantero que ha llegado al Cacereño procedente del Moralo, Raúl Iván Fabiani, que es uno de los techos del grupo de Tercera extremeña con 1 metro 98 centímetros.

Aunque sus características físicas le definen como un delantero tronco , Fabiani se considera un jugador normal que sabe jugar el balón como otro cualquiera a pesar de su altura.

Doble de Carew

Otra de las características del nuevo ariete verde es que guarda un especial parecido con el exdelantero del Valencia John Carew. Tal es el parecido, que en su etapa en las categorías inferiores del Villareal, club en el que se formó, entrenó unos días con el primer equipo amarillo, con sólo 17 años, para que sus compañeros se acostumbrarán a marcar a un jugador cercano a los dos metros, ya que el Valencia por aquella época esperaba con el temible delantero noruego. La anécdota no pasó desapercibida y Fabiani se convirtió en estrella por un día en el Telediario de Antena 3.

Después de aquella experiencia, "fue algo muy bonito", recuerda con nostalgia y cariño, no se ha podido quitar esa comparación con el delantero noruego. "Mis amigos me llamaban Carew", sonríe.

Referente ofensivo

El joven delantero no ha tardado en demostrar lo que mejor sabe hacer, que es meter goles, ya que en el amistoso del Cacereño en Coria marcó los dos tantos que evitaron la primera derrota del equipo de Miguel Angel Mateos. A pesar de su juventud tendrá la responsabilidad de ser uno de los referentes ofensivos junto con Ramiro, del que piensa que es positivo tenerle al lado en el campo.

Su físico se corresponde más con el de un jugador de baloncesto, pero desde pequeño prefirió meter goles a canastas, a pesar de que su padre insistía en que probara el mundo de la canasta. Pero aunque el básket no se le hubiera dado mal, eligió el fútbol y hasta la fecha no le ha ido nada mal.