Nuevo capítulo de crisis en el Real Madrid, donde ni el billete para las semifinales de la Copa del Rey aporta tranquilidad. Ayer, el dirigente de la entidad blanca, Florentino Pérez, convocó a la prensa para desmentir el ultimátum que dos de los capitanes, Iker y Ramos, le plantearon al presidente sobre Mourinho. "Presi, en junio, Mourinho o nosotros", rezaba la portada del diario Marca , que añadía que algunos jugadores importantes pedirán el traspaso si continúa el técnico portugués. Poco después también hubo un comunicado oficial firmado por ambos futbolistas en los que negaban ese ultimatum y donde aseguraban el "máximo respeto" a el entrenador portugués.

Pasadas las 10 de la mañana de ayer, Florentino decidía convocar a la prensa en el palco del Bernabéu. El motivo, calmar el revuelo que se estaba formando por la información del diario deportivo. El presidente desmintió que en la reunión del pasado martes en la que se habló de las primas de la temporada, Casillas y Ramos le plantearan a Florentino que si Mourinho sigue la próxima campaña, algunos miembros de la plantilla se buscarán la vida en otro club.

"Ante la gravedad de lo ocurrido rompo mi norma de no hablar para que quede claro que es rotundamente falso ... que se plantease ningún tipo de ultimátum respecto al entrenador ni nada que se le parezca", declaró Florentino.

Pérez, que en ningún momento mencionó al medio que publicó las informaciones que desataron su comparecencia y que se refirió a él como "un diario de Madrid", salió al paso de las "descalificaciones reiteradas" y de "gran gravedad" del medio de comunicación. "Tengo un gran respeto por la prensa, asumo las críticas, aunque sean objetivamente injustas. Tengo una gran capacidad de aguante, pero tengo que responder a las descalificaciones reiteradas. Hay unos límites éticos", afirmó. Casillas y Ramos, en el comunicado que firmaron de forma conjunta, califican de "falsa en su totalidad" la información sobre el ultimátum de Mou .

Florentino añadió que la noticia es "un hecho muy grave que está poniendo en riesgo a la institución, al equipo y jugadores". "Hay alguien al que no le gusta y que cada vez que tenemos un éxito intenta desestabilizar al club", indicó.

Por último, el presidente confirmó que no había hablado con Mourinho tras lograr el miércoles el pase a semifinales de la Copa del Rey, y no quiso hablar del posible fichaje de un portero tras confirmarse la lesión de Iker Casillas.