Muchos aseguran que Dani García, Deon Thomas y Juan Antonio Orenga hubiesen jugado el sábado ante el Pamesa si el partido hubiese sido absolutamente decisivo. Pero como el Cáceres ya contaba con esa derrota --más o menos amplia, con mejor o peor imagen-- se decidió no forzarles , porque en el horizonte hay otra cita en la que el equipo se juega mucho más. La obsesión es creciente en el vestuario y entre la afición con el partido del próximo sábado, 18 de enero, frente al Fórum Valladolid.
Los números son claros después de disputarse la penúltima jornada de la primera vuelta en la Liga ACB. Los verdinegros, terceros por la cola en la clasificación, aventajan en sólo una victoria a los pucelanos, que vienen de ganar, agónicamente y en la prórroga, al Casademont Girona (92-90). Era el fin de una racha de doce derrotas consecutivas para un equipo que llegará con dos de los rostros más paradigmáticos de la reciente historia del Cáceres: el entrenador Luis Casimiro y el base Oscar González, éste decisivo en el triunfo frente a los catalanes. También Pablo Laso pasó unos meses en el club hace algunas temporadas, en 1998, cuando se estuvo muy cerca del descenso.
MIRANDO ABAJO
Ese objetivo de la permanencia vuelve a teñirse de verdinegro, justo en un momento convulso en lo institucional. Casi acostumbrados a las turbulencias y a la carestía económica, a la plantilla extremeña le queda el orgullo y una profesionalidad difícilmente cuestionable. Hasta el propio entrenador del Pamesa, Paco Olmos, hizo referencia a ello tras la previsible paliza del sábado (98-69): Manolo Hussein sólo pudo alinear a un pívot sano --y prácticamente recién llegado, Kevin Thompson-- frente al líder de la competición, y aún así no se dejó de pelear con la cabeza alta, pese a lo abultado del resultado.
La mente de todos está en el choque ante el Fórum. Un resultado positivo --y quizás una notable diferencia en el marcador...-- volvería a abrir hueco en la zona más caliente de la clasificación, esa raya que divide a los que permanecen en la élite del baloncesto nacional de los que se marchan a la Liga LEB.
A pesar de la decepción que supuso que el Casademont no echase una mano en el pabellón Pisuerga --llegó a disponer de un tiro libre en el último segundo para ganar al final de los 40 minutos--, al Cáceres al menos le queda una lectura menos mala de la jornada: el Granada, colista, perdió ayer por 91-82 en la pista del DKV Joventut. La situación deportiva de los andaluces parece más a la deriva que nunca y corren serio peligro de descolgarse definitivamente y asignarse prematuramente una de las dos fatídicas plazas.
Al Cáceres también le queda otro buen sabor del fin de semana: la brillante actuación de Thompson. En un solo encuentro ha superado las mejores marcas estadísticas en la temporada de su antecesor, Bobby Martin, que nunca alcanzó los 16 puntos, 13 rebotes y 3 tapones que Thompson logró en Valencia, prácticamente en solitario bajo los aros. En esa batalla interior, el Fórum espera a su último refuerzo, Amal McCaskill, consolida el acierto de Anthony Bonner (26 puntos ante el Casademont) y intenta que un subcampeón del mundo como el argentino Gaby Fernández sea más regular; en el multiusos esperarán Thompson, Dani García, Thomas y Orenga.
