MERIDA - 2: Raúl Moreno, Jesús González, Paco Borrego, César Morgado, Jonhy, Zamora, Vivanco, Joaqui, Aitor (Pablo Gil, min.85), Diop (Elton Martins, min.59) y Pedro Conde (Gonzalo, min.90).

GRANADA B - 1: Dimitrievski, Alex Carmona, Pawel (Corozo, min.46), Morante, Brian, Uche, Navarrete (Denilson, min.64), Clifford, Tomás (Sergio Martín, min.46), Nico y Sergi Guardiola.

GOLES: 1-0 César Morgado, min.35; 2-0 Pedro Conde, min. 52; 2-1 Sergi Guardiola, min.81.

ARBITRO: Díaz de Mera Escuderos. Castellano-Manchego. Amonestó a los locales Jesús González, Paco Borrego, Jonhy, Zamora y Elton Martins; y a los visitantes Pawel, Brian y Sergi Guardiola.

Con bajas muy importantes y ante un rival que por calidad individual debería estar una categoría por encima, el Mérida consiguió llevarse la victoria ante el filial del Granada (2-1) con dos ingredientes muy claros: seriedad defensiva y efectividad ofensiva. La única duda que había en la previa era saber quién sería el media punta y Antonio Gómez se decidió por Diop, quien no defraudó, pues se ofreció siempre cuando el balón era local y recorrió muchos metros, hasta que el físico le duró, cuando había que hacer coberturas defensivas.

El Mérida dio un recital de cómo se tiene que defender en esta categoría a un equipo con tanta calidad como el de José Miguel Campos: con ayudas y coberturas para que uno de los suyos nunca se encontrara en un mano a mano con un rival. Por eso los rojiblancos siempre tenían a un segundo hombre cuando conseguían marcharse del primero. El plan de Antonio Gómez pasaba por una defensa que nunca perdiera la posición, con Zamora por delante, que tampoco se permitía subidas, más Vivanco como interior, pero en funciones claramente defensivas, y Diop con mayor libertad ofensiva con pelota, pero con deberes defensivos sin ella. El peligro lo tenían que crear los balones en banda para Aitor y Joaqui, y la lucha arriba de Pedro Conde.

POSESION SIN PELIGRO Con este plan, llevado casi a la perfección por los jugadores del Mérida, el Granada B no tuvo opciones de crear peligro a pesar de tener la mayor parte de la posesión. Campos ya destacaba en la previa que su equipo estaba teniendo problemas para defender las jugadas a balón parado y se demostró en el tanto de César Morgado. Corría el minuto 35 cuando Joaqui lanzó una falta lateral muy tocada que César Morgado acertó a cabecear adelantándose a la defensa y al portero granadino, poniendo el uno a cero en el marcador. Antes y después, hasta el descanso, se vio un partido con muy pocos acercamientos con peligro, ya que el Granada B, con más balón, no conseguía encontrar huecos, mientras que el Mérida tampoco lograba enganchar ninguna contra con peligro.

A José Miguel Campos no le gustaba lo que estaba viendo de su equipo y realizó un doble cambio en el descanso. En defensa retiró a un central, Pawel, para que Alex Carmona, que era el lateral derecho, ocupara dicha posición, e introdujo a Corozo, que es un lateral de mucho recorrido. En el centro del campo, retiró a un media punta, Tomás, y puso a Sergio Martín para controlar mejor el centro del campo. Los cambios no sólo no mejoraron a su equipo, sino que a los siete minutos de la reanudación, un balón suelto por una descoordinación de la defensa visitante supuso que Pedro Conde se quedara en el mano a mano para poner el segundo.

SITUACION CONTROLADA Al verse con tanta desventaja en el marcador, los visitantes quisieron buscar con más ahínco la portería de Raúl Moreno, incluso con la entrada de otro delantero como Denilson, sin embargo, el Mérida tenía absolutamente controlada la situación, sin pasar apuros atrás y con la esperanza de aprovechar los huecos que el Granada estaba dejando en su defensa. La única preocupación radicaba en que tres de los cuatro defensas, más Zamora, tenían amarilla (la de Jonhy supone suspensión).

Cuando a Diop se le acabó la gasolina, Antonio Gómez dio entrada a Elton Martins, colocándose Joaqui en una posición más centrada. Parecía que el partido acabaría sin sobresaltos para los locales. Sin embargo, a nueve minutos para el final, el propio Elton Martins perdió un balón en zona defensiva, que supuso la internada de Nico, quien cedió atrás para que Sergi Guardiola, tras un segundo error de Martins en el despeje, marcara a puerta vacía. A pesar de que restaban trece minutos, contando con el añadido, el Mérida fue capaz de tirar de experiencia y frenar las acometidas visitantes para defender una victoria de mucho mérito por el rival y las circunstancias que le rodeaban.

Con estos tres puntos, el Mérida se coloca a cuatro de los puestos que dan derecho a jugar la Copa del Rey, objetivo que podría estar aún más cerca si consiguen vencer el domingo próximo en Algeciras (17.00 horas).