"El nombre del Cacereño no lo va a manchar nadie. Aquí no nos van a imponer nada los que vengan de fuera; aquí se hará lo que diga el que es el dueño del club. Además, seguimos siendo uno de los clubs más emblemáticos de la región y tenemos la mejor cantera". Con esta contundencia se expresa Juan Ojalvo, vicepresidente deportivo del Cacereño, molesto por lo que considera una campaña de desprestigio contra el club verde dirigida desde distintos ámbitos.

"Que Copito diga que no se quiere quedar vale, pero yo creo que tenemos a uno que puede hacerlo igual o mejor que él, que es el juvenil Juanqui", argumenta cuando se le recuerda que, como ya ha publicado este periódico, el jugador perteneciente al Mérida ya ha dicho públicamente que no seguirá en Cáceres.

PARALISIS Ojalvo está a la espera de instrucciones para participar en el nuevo proyecto, pero todo está paralizado por el estado anímico del presidente, Félix Campo, tras la trágica muerte de su hijo de cuatro años.

"No sé; me quedería con tres o cuatro o, según, a lo mejor más, pero todo dependerá de lo que diga el presidente. Yo quiero un proyecto ambicioso, pero de momento no se puede decir nada seguro; yo sólo estoy contento con la actitud del equipo en la última parte de la temporada", expone el veterano directivo.

Ojalvo también se declaró molesto por lo manifestado por Manuel Sánchez Delgado, Manolo , sobre la opción de entrenar al Cacereño. "Parece ser que ha dicho en la Cope que mucho tenía que cambiar esto para que él viniera. Yo pienso que él tendría que estar agradecido porque el Cacereño le diera la oportunidad de ser su primer equipo como entrenador. Yo quiero mucho a Manolo, pero ni él ni nadie nos va a imponer nada", advirtió. "Estoy harto de que se vayan diciendo por ahí tonterías y gilipolleces", sugirió Ojalvo.

Sobre el actual entrenador, Miguel Angel Mateos, explica: "El mismo me ha dicho a mí que el presidente le comunicó que no quería que siguiera", con lo que, dice Ojalvo, la mejor solución es negociar la rescisión del año de contrato que le resta.