Luis Miguel Olivar García (Madrid, 23-01-73, 1,77), que es el único refuerzo del Mérida en el mercado de invierno, fue presentado en la tarde de ayer como nuevo jugador romano , minutos antes de participar en la primera sesión preparatoria a las órdenes de su nuevo entrenador, Andrés García Tébar, quien, por cierto, cumple ahora un año al frente del conjunto emeritense.

El centrocampista, que firmó por lo que resta de campaña y la próxima, inicia su tercera etapa en el Mérida. La primera, en la 96-97, coronó con el segundo ascenso emeritense a Primera. La segunda, más modesta, fue en Segunda B durante la temporada 01-02 y la primera vuelta de la 02-03.

En su presentación, el madrileño dijo sentirse "muy orgulloso de volver a mi casa" y expresó su deseo "de retirarme aquí, pero dentro de unos cuantos años, pues todavía tengo cuerda para rato" .

Optimismo

Olivar destacó que "el Mérida tiene un gran equipo. Le he visto jugar dos veces, una en casa y otra fuera, aparte de varios partidos por televisión, y es de lo mejor de la Tercera División extremeña".

El madrileño llega dispuesto a jugar el próximo sábado ante el Coria "eso sí, siempre que el entrenador lo crea conveniente. En el Extremadura, no jugué los últimos partidos por un leve esguince de tobillo, pero ayer ya entrené en Almendralejo y toqué el balón con normalidad".

Sobre su salida del Extremadura, Olivar fue conciliador. "Mi salida de Almendralejo ha sido amistosa. Creo que las dos partes hemos actuado de forma fenomenal. ¿Que he tenido que perdonar mucho dinero? Ahora soy feliz por estar de nuevo en el Mérida y lo demás ya no importa", sentenció.

De otro lado, el presidente del Mérida, José Fouto Galván, confirmó que negocia la salida de la entidad, a petición del jugador, de José Manuel Rojas. Al tratarse de un sub-23, el Mérida cubriría su baja subiendo al primer equipo a un jugador del Mérida juvenil que prepara José Ramón Cabezas.