El nuevo presidente del Extremadura, Luis Oliver Sierra, compareció por primera vez con oficialidad en la sala de prensa del Francisco de la Hera en una rueda que fue «para relajar los ánimos de la afición», tras la resolución del Consejo Superior de Deportes del pasado viernes donde se inhabilitaban a las sociedades Héroes Extremeño y Viriato Sport que forman parte del Consejo de Administración del Extremadura, poniendo en peligro la presidencia de Oliver y la mayoría de su grupo en el consejo.

Sin embargo, Oliver Sierra ha asegurado que no se producirá ningún cambio ni en el consejo ni en el accionariado del club, al considerar que el dictamen del CSD contiene «un error de interpretación y es demostrable». Oliver entiende que el CSD ha interpretado que la familia Oliver disponía de acciones en el Córdoba y en el Extremadura al mismo tiempo, algo que ha tildado de erróneo. «Le faltan datos al CSD para tomar una decisión así y nosotros los aportaremos para aclararlo todo», asegura Oliver. Entre esas pruebas, señalan que presentarán la sentencia que se dictó recientemente en el juzgado de instrucción número 7 de Córdoba con el despido improcedente de la empresa Bitton Sport, sociedad a la que pertenecía Oliver y desde la cual trabajaba para el Córdoba.

Oliver ha dicho no temer ningún movimiento que pueda hacer el grupo de Manuel Franganillo para revocarlo en el cargo y aclara que sus abogados ya trabajan para presentar las alegaciones pertinentes ante el CSD. «Hay tanta información al respecto para desmontar la teoría del CSD que ni me preocupa. El Registro Mercantil no toma decisiones que no sean legales. Mis abogados me dicen que no hay recorrido con lo del CSD».

PAGOS / Una situación que preocupa mucho en torno al Extremadura UD son los impagos existentes a determinadas parcelas del club y a los principales proveedores. Oliver confirmó que durante esta semana irán procediendo al pago de todas estas deudas «a trabajadores y personas que componen la familias del Extremadura. El femenino, por ejemplo, ha estado abandonado por el club, y vamos a proceder a regularizar su situación, al igual que la del juvenil y el filial».

El presidente azulgrana desveló que su grupo aportó 50.000 euros el pasado viernes para pagar a algunos jugadores que no habían cobrado, así como a algunos miembros del cuerpo técnico y otros empleados.

Por otra parte, también desveló que los 600.000 euros pendientes por el caso Enric Gallego llegarán a las arcas del Extremadura esta misma semana, después de la reunión que el propio Oliver Sierra tuvo con miembros del club oscense el pasado fin de semana. Según ha podido saber este periódico, ya hay sentencia al respecto en este caso a favor del Extremadura.

AFICIÓN / El nuevo presidente sacó una valoración positiva tras su primer encuentro con los representantes de las peñas: «la afición no quiere salvadores. No les importa quién es el presidente siempre y cuando tengan un club estable y sin problemas. Es gente sana que sólo quiere que al Extremadura le vaya bien y que el club no deje tirado a nadie. Prefieren un club que no se hipoteque que subir a Primera».

También dijo en su comparecencia de prensa que el grupo Oliver había puesto de su bolsillo en este proyecto en torno a cuatro millones de euros y que duda de que, a estas alturas de año, pudiera haber algún comprador. «Lo primero que quiere saber un inversor en marzo es saber en qué categoría estará en junio».