El discurrir de la duodécima etapa de la Vuelta Ciclista a España tuvo dos puntos de interés claros. Por un lado, la victoria del italiano Luca Paolini sobre la meta de Guadalajar, mientras que por otro destacó la negativa de Oscar Freire a disputar el Mundial de fondo en carretera. El esprinter era la principal baza para volver a conquistar el maillot arcoiris.
El seleccionador nacional de ciclismo, Francisco Antequera, confirmó ayer la baja de Freire para la prueba de fondo, que se disputará en Salzburgo (Austria) el próximo 24 de septiembre, y señaló a Alejandro Valverde como la "única baza" del equipo español.
El técnico valenciano habló la noche del miércoles con el corredor cántabro, tras su abandono en la Vuelta a Polonia, y éste le confirmó sus intenciones de no disputar el Mundial.
"Aunque él tenía la confianza de poder recuperar el golpe de pedal en esta prueba, el abandono ha cortado con todas sus posibilidades. Me ha dicho que para no estar al cien por cien, mejor es quedarse en casa", comenta.
De esta forma, el planteamiento estratégico de la selección pasará porque Valverde sea la "única baza", según Antequera. "Intentaré arroparle con un equipo que gire entorno a él, sobre todo en el tramo final. Mi idea es que pueda estar con él algún corredor que pueda lanzarle, y así no tener que depender de otros ciclistas de otras selecciones. Pienso que el año pasado (el belga Tom) Boonen no le habría superado si hubiera tenido a alguien que le lanzara el esprint", agregó el seleccionador.
El propio Valverde reconoce que tendrá "más presión", una vez confirmada la baja del triple campeón. "Ahora voy a tener más presión sin Oscar, un corredor que ha tenido muy mala suerte. Voy a ser el jefe de filas y lo voy a asumir con ganas. Ahora hay que acabar bien la Vuelta, porque está resultando muy dura", señaló Valverde.
EXITO ITALIANO Luca Paolini, del Liquigas, se impuso en solitario en la duodécima etapa disputada con viento, frío e incluso lluvia a través de 169,3 kilómetros entre Aranda de Duero y Guadalajara, jornada que permitió al líder Valverde pasar otra hoja en el calendario en espera de la contrarreloj de Cuenca.
Paolini, que a sus 29 años no conocía el sabor del triunfo en una carrera grande, se estrenó en la Vuelta gracias a un demarraje a falta de 3 kilómetros de meta que sorprendió a sus 11 compañeros de fuga, que se vieron impotentes en la persecución del italiano, que voló hasta la capital de la Alcarría para entrar a paso tortuga, disfrutando el momento.
