Si hay un nombre propio para el balonmano en Cáceres ese es el del CP Paideuterion. Más de tres décadas promoviendo la práctica de este deporte han dado lugar a algunos sinsabores, sin duda, pero también a muchas, muchísimas, satisfacciones. La última, el nombramiento por parte de la Federación Extremeña de Balonmano como mejor club deportivo del 2013, un premio al que acompañarán otros once en la Gala del Balonmano extremeño que se celebrará este domingo en Miajadas.

"No es un premio nuevo", indica José Arellano, presidente del club, que recuerda que "excepto en dos o tres ediciones", esa distinción siempre ha sido para el Padu . Pero todos esos premios e incluso los que recogerán el domingo son ya cosa del pasado. Ahora hay que seguir trabajando para que el balonmano no pare de crecer y "para volver a ser merecedores de los premios en el 2014".

Mantener el Paideuterion arriba parece a veces una lucha contracorriente. No solo por los problemas económicos, nuevos para muchos, crónicos para ellos, sino por la escasa visibilidad. "Hay deportes donde seleccionan a los niños; nosotros aceptamos a todos", afirma Arellano, resaltando lo importante que sería que Cáceres tuviera un equipo en la élite del balonmano, "un referente para los más pequeños". "Hubo un tiempo en el que nos ofrecieron tener un equipo arriba, pero tuvimos que rechazarlos por los problemas económicos. Elegimos mantener la base, ser un buen equipo de base".

El 'Padu', un referente

Y lo es. El Paideuterion no solo es un referente en el balonmano cacereño, lo es también en el regional e incluso en el nacional. "El Paideuterion es conocido, en este mundo del balonmano, en toda España", dice Arellano con orgullo. Le avalan multitud de niños que se han formado, como deportistas y como personas, en las filas del club. Le avalan los muchos jugadores que empezando en el Padu han acabado en la élite del balonmano nacional. Le avalan, por qué no, los premios que recogerá el domingo.

Este año pueden ser más de 200 personas, desde los niños de 6 años hasta los jugadores de los equipos seniors, las que forman parte del Paideuterion, que esta semana comenzó los entrenamientos después de una ardua tarea de captación de jugadores por varios colegios de Cáceres que arrancó el pasado mes de mayo y que aún sigue en marcha. Es más, todos los niños que quieran aún están a tiempo de unirse al club y divertirse con el balonmano.

Diversión hay mucha, sobre todo entre los más pequeños, "donde evitamos la competición". Pero también hay "mucho sacrificio, mucho esfuerzo. Para alcanzar las metas hay que trabajar duro. Eso lo deben saber todos".