Mérida: Segura, Canterla, Víctor Marco (Pablo Niño, min. 60), Pepín, Muiño, Carlos Rubén (Plá, min. 75), David Pirri, Juanfran (Alberto García, min. 84), Segovia, Juan Jesús y Carreño.

Sevilla Atlético: Vargas, Casado, Crespo, Redondo, Lolo, Bruno, Pablo Sánchez (Víctor, min. 64), Cordero, Juan Pablo (Enrique Carreño, min. 88), Alfaro, Diego Capel (Rodiel, min. 85).

Gol: 0-1, min. 88, Rodiel.

Arbitro: Villena Contreras. Bien. Amonestó al visitante Juan Pablo y a los locales Juan Jesús, Víctor Marco y Canterla.

Incidencias: 1.500 espectadores en el Estadio Municipal Romano. Terreno de juego en mal estado.

La despedida del año futbolístico en el Romano no pudo ser más dolorosa, con una derrota en los minutos finales del Mérida ante el Sevilla Atlético. El partido fue horrible para los aficionados y malo para los entrenadores, pues ninguno de los dos equipos pudo desplegar el juego que pretendían debido al estado del terreno de juego.

Así pues, casi todo ocurrió en el centro del campo, donde la lucha no cesaba y, a pesar de que Ardila hizo un gran partido, la figura de Juan Carlos se echó en falta. Ante tanto peón de briega, las ocasiones no llegaban hasta que en el minuto 36, Juan Pablo, completamente solo, remata picado un córner lanzado desde la derecha, Segura despeja y aleja el peligro la defensa.

Fue el único acercamiento de los primeros 45 minutos por ambos bandos. Jaime Molina, que tuvo que ver el partido desde la grada por sanción, dispuso un ataque en el que Carlos Rubén y Juan Jesús se intercambiaron sus posiciones, el primero entrando por la derecha y el segundo por el centro detrás de Carreño, que reaparecía en esta jornada.

CON POLEMICA A falta de ocasiones, el Mérida protestó una agresión de Lolo a Juan Jesús cuando el balón circulaba por otra parte del campo, lance del juego que no observaron ni el colegiado ni el asistente.

Se llegaba al descanso con un Sevilla Atlético que poco a poco iba cogiendo la manija del centro del campo gracias a la buena actuación de Bruno y un Mérida que por la derecha no entraba, pues Carlos Rubén tenía tendencia al centro y por la izquierda, David Pirri nunca llegó a superar a su lateral.

En la reanudación, el filial sevillista quiso finiquitar rápido el encuentro y en el primer minuto tuvo la mejor ocasión hasta el momento. Una falta lateral es lanzada por Bruno y, tras un rechace, el balón le cae a Alfaro que remata de primeras con la zurda para que Segura despeje a saque de esquina.

El asedio en los primeros minutos por parte sevillista, aunque sin crear ninguna ocasión, hizo que al Mérida le costara salir de campo propio hasta que Carreño se inventó una jugada individual con disparo final alto. Parecía que la segunda mitad iba a ser más entretenida, pero nada más lejos de la realidad.

MOMENTO DE LA VERDAD Los hispalenses pidieron en el minuto 55 penalti en una jugada en la que fueron derribados hasta dos jugadores andaluces que el árbitro no entendió como tal. La emoción del resultado mantuvo la incertidumbre de un encuentro que escribió su historia en los últimos dos minutos.

Primero fue el Mérida el que estuvo a punto de marcar en un remate desde la frontal de Carreño tras un centro por la derecha que hizo emplearse a fondo a Vargas y mandar el balón a córner. El contraataque de ese saque de esquina fue una jugada individual de Rodiel, que había salido dos minutos antes, en la que dejó sentado a tres jugadores del Mérida, para marcar en el mano a mano con Segura.

En definitiva, un nuevo jarro de agua fría en los minutos finales que le aleja al Mérida a seis puntos de los puestos de liguilla de ascenso, aunque todavía no hay nada perdido.