No le ha favorecido el calendario y tampoco los precedentes. Sin embargo, el Extremadura juvenil que ahora digige Jesús González está dispuesto a romper con la estadística y redondear el milagro en el que está inmerso. Los azulgranas han sumado los doce últimos puntos que han disputado y están en disposición de salvar la categoría dependiendo de sí mismos cuando parecían avocados al descenso.

Por eso van a salir mañana domingo, desde las 12.00 del mediodía, ante el Leganés y en el Francisco de la Hera, decididos a certificar su permanencia. Y eso que la última vez que este equipo bajó era 25 de abril y que precisamente por eso, por la coincidencia con la Romería de San Marcos --fiesta local y éxodo masivo al campo de la población--, va a tener muy complicado contar con un apoyo masivo desde la grada. Con todo lo van a intentar y se han hecho llamamientos a la afición para que compatibilicen su afición deportiva con su devoción al santo y a las costumbres. Eso sí, hay que subrayar que el partido es el estadio azulgrana y no en la Ciudad Deportiva, como hasta en los primeros carteles que sacó el club a la calle se apuntaba por un lamentable error.