Pedro José Lorenzo (Torremejía, 17-11-67) sigue siendo un ejemplo para los chavales que empiezan en el fútbol. Comenzó a jugar en cadetes y juveniles del Pizarro, club emeritense de fútbol base. De ahí al Extremadura, con el que subió de Tercera a Primera, categoría en la que llegó a jugar dos temporadas. Uno de sus años en Primera el por entonces técnico del Atlético de Madrid, Radomir Antic, llegó a ponerle como ejemplo de lo alto que puede llegar un futbolista por muy modesto que sea a poco que se lo proponga. El año pasado jugó en el Mérida, con el que subió a Segunda B, y el verano pasado fichó por el Imperio.

Hombre de confianza

A sus 38 años, Pedro José es el hombre de confianza de su entrenador, Juan Marrero, que le ha utilizado ya en 29 partidos (28 como titular) por encima de Edu (28 partidos), David Mera, Macías y Vicente (27 cada uno), que son sus más directos perseguidores.

En minutos jugados, con 2.421, sólo le supera David Mera (2.430). Por debajo, tiene a Fabio Vadillo (2.300).

El de Torremejía resta importancia a estos números al afirmar que "aproveché que el equipo tuvo bastantes bajas, aunque también me encontré bastante bien durante toda la temporada".

El centrocampista, reconvertido a central esta temporada, tiene cuerda para rato, pues asegura que "me gustaría seguir jugando otro año dado que sigo teniendo ilusión y ganas". Lo dice Pedro José, un chaval de 38 años. Ahora su única meta es aportar su grano de arena para que el Imperio acabe lo más arriba posible.