1 - LOBÓN: Kouba; Andrei (Uva, min. 83), Torino, Cisco, Manu, Pedro Juan; Félix, Chory (Escorial, min. 79); Balsera (Manu, min. 66), Navia (Cristian, min. 79); Jaime (Nene, min. 66).

0 - ACEUCHAL: Juanfran; Leandro, Dela, Aguza (Cristian Mesías, min. 5), Margallo (Juanan Vélez, min. 46); Tirado, Fran Rosales, Rafa Izquierdo (Pelu, min. 68), Rosado, Caballero (Aranda, min. 75) y Juan Germán.

Gol: 1-0: min. 62: Pedro Juan, de penalti.

Árbitro: Agraz Díaz. Por el Lobón enseñó cartulina amarilla a Manu, Nene y Kouba. Por el Aceuchal, a Rosado.

Incidencias: Municipal de Lobón. Unos 150 espectadores.

Pasando las de Caín, Abel y con los corazones casi en pandemia cardiovascular, el Lobón logró ante el Aceuchal su segundo laurel en el curso merced a un gol desde el punto letal del campesino del gol

Alumbrado por la euforia cada vez que se da el silbido inicial, el Lobón trató de amedrentar a un rival que creció y ganó enteros en la escuela de valores con el devenir del reloj. Un centro anecdótico de Torino al epicentro del área seguido de otro de Jaime que ni cosquillas hizo al meta piporro, bautizó el bloc. El Aceuchal ajustaba sus resortes en el verde y poco a poco fue tirándose a los lomos y yugulares de los loboneros. El purasangre Juan Germán empezó a exhibir sus herraduras subiendo el mercurio táctil de Juanfran antes del ¡uy! y el aumento de frecuencias cardíacas que provocó un testarazo a la madera de Balsera (min. 15).

Un servicio de Leandro, desviado por Kouba, provocó la coz aérea de Juan Germán (m.21). Ponía las serpentinas en el campo el Aceuchal y el tsunami desde la frontera del área de Juan Germán reventó la cruceta gualdinegra. Los loboneros apenas emitían aullidos en forma de ocasiones y Félix probó testimonialmente a Juanfran. A refrescarse.

Concursaba Juanan Vélez para seguir la rueda de corazón y oleadas ofensivas de Caballo Loco Juan Germán, pero con poca lumbre. Caballero en boca de gol se topó con San Kouba (min. 50) y sin noticias hasta caer el premio gordo tras ser víctima de un bailar pegados Mario Navia. El juez del pleito hizo sonar la música letal y Pedro Juan, pierna diestra, colocó la piedra del féretro de un cuadro piporro que intentó remediar males como pollo sin cabeza sin evitar la segunda victoria lobonera del curso.