Volver a empezar, éxodo, toma el dinero y corre.... La diáspora vivida por la plantilla del Cacereño nada más concluir la temporada tiene referentes cinéfilos. Hasta 14 futbolistas del primer equipo han hecho las maletas para no volver al Príncipe Felipe, a lo que hay que añadir la marcha del técnico.

El Cacereño sigue la máxima de ´a rey muerto, rey puesto´. Del último once alineado en Mieres (Pedro, Sergio Céliz, Yoni, Lucas, Héctor, Ruano, Rotundo, Sergio, Bruno, Mato y Cantarutti) no quedarán el próximo año ni los restos. La alineación sufrirá una mutación radical y solo el capitán Sergio y Ruano continúan.

La reconversión del equipo será profunda y Pedro Rossi se ha puesto manos a la obra. Es una reedición de la historia del año pasado. El secretario técnico tiene total libertad, dentro de las limitaciones del presupuesto, para volver a armar un equipo competitivo con el menor coste posible.

El argentino será el arquitecto del Cacereño 2007/2008. Y su labor afectará por entero a la columna vertebral del equipo, desde la portería hasta la punta del ataque. Rossi, no obstante, tiene respuesta inmediata para las contingencias que se le plantean. Otra cosa es que su labor tenga la recompensa de hace un año. En ese caso habría que empezar a pensar en él como el Monchi de Tercera; un tipo que saca petróleo del mercado futbolístico.

No se descompone éste por el carrusel de despedidas. Parece tener un plan B, un plan C... y todos los que sean necesarios para las circunstancias que se planteen en cada momento. Un equipo al que se le marchan 14 jugadores de un día para otro se encontraría como mínimo desconcertado. El no. Es perro viejo y contemplaba esta posibilidad. Por ello, no deja de trabajar durante toda la campaña. Tomando notas, viendo la situación de los jugadores, escuchando propuestas, escarbando en el mercado, vendiendo el proyecto como una catapulta hacía objetivos mayores... Se maneja bien en la cuerda floja.

Asegura, flemático, que tiene confirmado el 80 por ciento de la plantilla. Confiando en su palabra, el argentino ha configurado prácticamente un equipo entero en ¡¡dos semanas!!

A rey muerto, rey puesto

Que se va Cantarutti, máximo goleador del grupo XIV, le sucede en el puesto Toni, que le precedió en la tabla de goleadores. Que se marcha Lucas, da igual. Se responde con el central Maxi, del Don Benito.

A una baja importante se contesta con un refuerzo, a priori, de garantías. Nadie daba un duro el año pasado por Cantarutti o Lucas. La historia se repite este verano. Rossi, cual mago, buscará seguir sacando conejos de su chistera; esa agenda mágica que le permita pergeñar un nuevo salto mortal y sin red. De triste figura y aspecto lánguido parece apocado, pero es más vivo que ¡un escorpión! y está ante su segundo examen. El primero lo aprobó con nota. ¿Repetirá?