El Gran Premio de Cataluña de motociclismo dejó disputado ayer dejó nuevo las sensaciones de tremenda superioridad de los dos pilotos más punteros en el mundial hoy por hoy. Dani Pedrosa, en 250cc, y Valentino Rossi, en MotoGP, volvieron a repetir victorias y se consolidan más en los lideratos de las respectivas categorías.

Pedrosa venció con total autoridad, aunque para ello también se benefició de diversos percances que acontecieron en la décima vuelta, en la que el mallorquín Jorge Lorenzo topó con Alex de Angelis y ambos se fueron al suelo.

La victoria de Pedrosa representó un récord personal porque fue la tercera victoria consecutiva (se ha impuesto en cuatro de las seis carreras), pero también acabó con un maleficio que pesaba sobre los pilotos españoles en Cataluña, pues nunca antes uno de ellos se había elevado a lo alto del cajón en esta categoría.

Pedrosa se instala con una ventaja aún mayor en la clasificación general, pues ha sumado 25 puntos que le consolidan en la primera posición con 123, mientras que el australiano Casey Stoner es segundo (96 puntos) y el italiano Andrea Dovizioso, tercero (93).

DOMINADOR ROSSI El italiano sumó en Montmeló su quinta victoria en seis carreras, después de un duelo que fue un mano a mano con Sete Gibernau, quien dominó durante 22 de las 25 vueltas, pero del que volvió a salir perdedor.

La carrera fue un calco de la del año pasado. Si entonces, Gibernau cedió en la última curva, ayer lo hizo a tres vueltas para el final. Rossi se mantuvo siempre a la espectativa, jugó con los nervios del español y, de nuevo, salió victorioso.

Tercero fue Marco Melandri, compañero de equipo de Gibernau, quien se ganó su derecho de estar en el podio, después de una lucha con el brasileño Alex Barros y el estadounidense Nicky Hayden. El italiano Max Biaggi fue finalmente sexto, Rubén Xaus décimo, Carles Checa undécimo y David Checa decimotercero.

La superioridad de Rossi quedó de nuevo patente. La emoción de correr un buen número de pilotos en grupo duró apenas las primeras cuatro vueltas.

Melandri se situó primero y compartió esta plaza con Gibernau, hasta que Rossi pasó a la acción en la cuarta vuelta, pero el español recuperó la primera plaza inmediatamente.

Desde ese momento y hasta la vuelta 22, Gibernau fue siempre en cabeza. Rossi estaba al acecho, nunca permitió que el español se distanciara y cuando Sete se situaba con un máximo de medio segundo, apretaba para ponerse a rebufo.

Daba la impresión de que el italiano iba sobrado y así fue. Cuando a tres vueltas para el final pasó a Gibernau, los más de 105.000 espectadores que se dieron cita en Montmeló, intuían que la historia del año pasado o la vivida en la apertura del Mundial en Jerez se iba a repetir de nuevo. Rossi fue incrementando su ventaja y al final Gibernau se conformó con la segunda posición. Es la quinta victoria de Rossi en seis carreras. Había dicho que Montmeló era un circuito que le encantaba, había ganado en todas las categorías y hoy consiguió su séptima victoria desde su debut en este circuito.

EN EL OCTAVO DE LITRO El italiano Mattia Pasini (Aprilia) se convirtió en el primer piloto de la categoría en conseguir dos victorias en el campeonato y es el nuevo líder del Mundial, después de vencer con claridad en Montmeló sobre su compatriota Marco Simoncelli (Aprilia) y el finlandés Mika Kallio (KTM).

Las opciones de los españoles se esfumaron prácticamente en la novena vuelta, cuando cayó Héctor Faubel, que había salido en la segunda fila, estaba en disposición de luchar por la victoria y circulaba en tercer puesto.

AL SUELO Faubel, que llegó a marcar la vuelta rápida en carrera, se cayó en el duodécimo giro cuando intentaba dar caza a Mika Kallio y dejó sin opciones a los españoles, puesto que Julio Simón, quien luchó por la quinta plaza, fue finalmente octavo.

La victoria de Pasini fue incontestable, ya que ganó con más de nueve segundos de diferencia sobre el segundo. El italiano dominó la carrera de principio a fin y no dio ninguna opción a sus rivales. Se puso primero desde la segunda vuelta, tiró y nadie aguantó su ritmo de carrera.

Lo intentó Kallio, pero el finlandés que había salido con la pole nunca pudo seguir la estela de Pasini e incluso perdió la segunda plaza en el cajón en detrimento de otro italiano, Marco Simoncelli, quien completó un doblete italiano de Aprilia, mejor que las KTM en Montmeló.