Vicente del Bosque prefirió mirar hacia otro lado cuando le preguntaron ayer si no le extrañaba que alguien como Manolo Jiménez, entrenador del Sevilla, acabara de reconocer que no estaba al corriente de quién era el rival de la selección española hoy en A Coruña. Es Bélgica (22.00 horas, TVE-1), y haber acabado terceros en la Copa Confederaciones no es para tanto, cuando aún hay motivos sobrados para lucir el título de campeones de Europa y cuando se está a punto de obtener la clasificación para la fase final del Mundial 2010 tras haber encadenado seis victorias consecutivas.

"Lo más importante es que nosotros sí sabemos contra quién jugamos y cómo juegan", comentó el seleccionador español, sin dejar de llamar la atención sobre la injusticia que supone hacer de menos a un grupo que hace cuatro días levantó el ánimo de millones de aficionados.

La selección española no ha perdido el respeto de nadie, y menos del equipo belga, que aparecía en principio como uno de los rivales más serios para discutir a España la clasificación directa y que se ha quedado descolgada casi sin remedio ya.

TENSION COMPETITIVA La Roja , por contra, puede dejar sellado su pase si gana hoy a los belgas y el miércoles a Estonia en Mérida, siempre que Bosnia-Herzegovina no consiga hacer lo mismo en los partidos que tiene estos mismos días contra Armenia y Turquía. "El potencial de Bélgica no se corresponde con su clasificación. No digo que estén ya fuera, pero lo tienen complicadísimo", dijo Del Bosque, que trabaja para que los jugadores españoles recuperen la tensión competitiva y el buen gusto futbolístico que dejaron en cuarentena en la Confederaciones y en el amistoso de agosto frente a Macedonia.

Del partido de Skopje en agosto quedaron abiertos varios frentes, el más candente la conveniencia o no de seguir apostando por dos delanteros de entrada --Torres y Villa-- o partir con uno solo y un centrocampista más, el esquema con el que España acabó proclamándose campeona de Europa, con Villa lesionado desde la semifinal frente a Rusia. Con Torres en punta únicamente reaccionó España y levantó un 2-0 en contra ante los macedonios, lo que no llevará al seleccionador a seguir por ahí esta noche. Ha sido el gran debate en los últimos días, que no polémica, como se encargó de subrayar ayer el delantero del Valencia, y Del Bosque lo quiso dejar claro: serán titulares tanto el Guaje como Torres.

También parece claro que Marcos Senna intentará recuperar, tras cuatro meses de ausencia, la ascendencia que tuvo sobre el resto del equipo en Austria. Si a Del Bosque se le había pasado por la cabeza emparejarlo con Cesc en el centro del campo en detrimento de Xabi Alonso, el hecho de que ambos salgan de una lesión obra en favor del madridista. También Silva tiene todas las opciones de recuperar su rol en el once.