PLASENCIA EXTREMADURA: Javier Zaldive (3), Martín Calvo (4), Pablo Almazán (11), Jonathan Barceló (23) y M. Angel Conejero (10) --cinco inicial--, Marko Sekulic (4), Añaterve Cruz (5), Sergio Soria (0) y Lorenzo Díaz (0)

REAL MADRID: Juanín Jiménez (8), Juanjo López (5), David Marina (3), Jorge Santana (15) e Iñaki de Miguel (10) --cinco inicial--, Nico Richotti (19), Miguel Molina (2), Jose M Gil (2) y Alberto Franco (2).

ARBITROS: Roberto Alonso y Francisco Rastrollo. Regular. Sin eliminados.

MARCADOR POR CUARTOS: 12-17, 24-34 (descanso), 42-52 y 64-66 (final).

Muy pocos equipos van a ganar aquí; Plasencia tiene un gran equipo y una afición magnífica, que no merece estar en Plata". Así de contundente se expresó Alberto Angulo, entrenador del Real Madrid que sufrió en sus carnes el pundonor, el coraje y la garra de un Plasencia que remontó 10 puntos en el último cuarto y que tan solo la mala suerte le privó de ganar a un gigante en el último suspiro.

Plasencia salió entonado y con ideas claras, se colocó rápidamente por delante (10-4), pero un parcial de 0-11 le cercenó las ideas. Parcial al que ayudó la pareja arbitral señalando cinco faltas a los locales en menos de dos minutos, entre el mítico cántico de "¡Así gana el Madrid!". Pués así ganó el primer cuarto (12-17).

BIEN CONEJERO El poderío físico y la rapidez de los de Angulo elevaron la ventaja hasta los 12 (13-25) merced al acierto de un Nico Richotti fresco de ideas. De Miguel impuso su sapiencia a favor de su equipo, a pesar de la magnífica defensa de Conejero, que ayer realizó su mejor partido con la camiseta verde y que empieza a ser importante. En mitad del cuarto apareció en la cancha Geoffrei Silvestre y el pabellón le dedicó un emotivo y sonoro aplauso. Al descanso la ventaja madridista era de 24-34.

Tras la vuelta fue Barceló, que ahora lleva en su camiseta impreso su segundo apellido Bonnet, quizás para despistar, lo logró porque tiró de galones y de clase para anotar 10 puntos en este tercer periodo y colocarse a un palmo del Madrid (41-43). Sergio Soria no tuvo su día y dos pérdidas evitaron la igualada y dio alas de nuevo a los blancos que acabaron el cuarto diez arriba (42-52).

Con un triple de Barceló arrancó el periodo decisivo. Gomariz impuso a los suyos la necesidad de morir por cada balón y así lo hicieron. Pablo Almazán se volvió valiente, Conejero se multiplicó por dos y Añaterve se atrevió por fin con el aro. Zaldive puso la cordura y hasta el debutante Sekulic anotó un triple que puso el 60-63 a falta de dos minutos. El empate a 63 lo pondría Conejero, pero Juanjo López, que había estado perdido se jugó un triple que al anotarlo él fue el primer sorprendido. Tras fallar Nico sus tiros libres, con 64-66 en el electrónico y a falta de 16 segundos, Barceló decidió jugársela, intentó forzar la personal por tres veces, pero el argentino no arriesgó, quién lo hizo fue el capitán, pero su lanzamiento ganador lo escupió el aró. No lo mereció Barceló ni Plasencia, que fue aplaudido con ganas desde el centro de la pista, algo que ya casi no se recordaba.

El Plasencia deberá ahora reponerse de esta derrota, superar sus problemas internos (los de Geoffrei Silvestre) y empezar a ganar.