El Plasencia Galco trabaja esta semana con el firme propósito de romper este sábado su peor racha de toda la temporada. Las cinco derrotas consecutivas hacen que su enfrentamiento ante al Muro sea prácticamente una final, ya que aparte de distanciar a los baleares, la presumible victoria del perseguidor placentino, el Tarragona, en Sabadell, supone indispensable ganar.

El Muro llega tras ser humillado en su casa por el Axarquía, donde cayó derrotado por 41 puntos, además lleva tan sólo una victoria en sus últimos cinco encuentros, por lo que Ñete Bohigas consigue estrenar su casillero o el ambiente se pondrá más nervioso de lo que ya está, de cara a no meterse en play-offs, objetivo que hace unas semanas nadie ponía en duda.

Conejero no ha podido entrenar con normalidad debido a una fascitis plantar, pero se espera su concurso para el sábado. La obsesión del Bohigas pasa por recuperar el acierto exterior del equipo, y sin duda mejorar todos y cada uno de los porcentajes. La valoración total del equipo en su derrota frente al Askavayu Vic fue de 32 puntos (18 fueron de Blair), números que dejan a las claras el mal momento de los placentinos.

El partido servirá de presentación oficial de la cantera que se realizará en el descanso.