La cita es a las nueve de la noche de hoy en el pabellón placentino. El enemigo, el peligroso Cornellá. El Plasencia disputa un encuentro que será decisivo para su futuro.

Llegados al quinto partido del play off de ascenso a la Liga LEB, el grupo de Ñete Bohigas se apresta a hacer el penúltimo gran esfuerzo de la temporada, después de que la eliminatoria esté empatada a dos victorias tras enjugar los catalanes el pasado puente el 2-0 de los extremeños en los dos primeros encuentros de casa.

El conjunto placentino ha entrenado a conciencia esta semana para conseguir el objetivo de eliminar al Cornellá y disputar el play off definitivo ante el rival siguiente. La eliminatoria, como el marcador señala, está muy igualada, según ha insistido el técnico cacereño, quien reconoce el potencial de los catalanes, puesto de manifiesto en los dos últimos encuentros e incluso en los primeros choques de la eliminatoria, en los que el equilibrio fue la nota dominante, con rachas positivas y negativas en los dos conjuntos a lo largo de los 40 minutos.

EL PUBLICO, CLAVE

Tiene el Plasencia el factor cancha a su favor, lo cual no es poco. Se espera que la afición placentina vuelva a responder en masa y ejerza una presión decisiva en este trascendental choque.

La contrariedad son los problemas físicos de Juanmi Morales, pero el escolta pondrá todo para echar el resto en este choque clave. Por el contrario, los placentinos tienen a un Jiri Okac en estado de gracia, especialmente, además del resto de sus compañeros, que han formado un grupo que les ha dado el premio del campeonato y, quién sabe, pueden ser claves en el ascenso de categoría, una gesta que ni siquiera se había soñado cuando se inició la temporada.

El Plasencia, un club económicamente de los más modestos de la categoría, afronta con ganas lo que puede ser una nueva noche mágica. Pero para ello habrá que contar con un rival que, en ningún caso, llega como víctima.