El Plasencia Extremadura se enfrenta esta noche (21.00 horas) a un rival más preocupado en resolver sus penurias económicas que las deportivas, de lo que puede beneficiarse el club extremeño de la LEB Plata. Sin embargo, el entrenador placentino, Ñete Bohigas, avisa ante posibles confianzas y recuerda que estas situaciones de crisis, como las que él mismo ha vivido en su última etapa en el Cáceres, "hacen piña" entre los jugadores y pueden resultar ahora especialmente peligrosos.

En el Plasencia siguen siendo baja Edward Santana y Adolfo Santos y Jonathan Barceló sigue algo mermado, pero se espera que el equipo vuelva a mostrar su mejor cara y olvidar la paliza en Logroño (96-62).

El Unibasket Jerez atraviesa una profunda crisis institucional lo que ha llevado a que la propia plantilla jerezana emitiera un comunicado la semana pasada donde expresaban sus sentimientos de "rabia, soledad, tristeza e impotencia" ante la falta de cobro desde el mes de octubre y que "no sabemos cuánto más aguantaremos pero si no hay solución el final de este equipo podría tener los días contados. Lo peor de todo es que si en unos días no se arregla todo podríamos dejar de competir, lo que conllevaría la baja federativa y la desaparición del Unibasket".

Aún así el equipo se desplazó a Alcalá de Guadaira en sus coches particulares y ganaron al Qalat (87-94) tras prórroga.

Durante la semana los pupilos de Toa Paterna no han entrenado y a pesar de todo darán la cara ante los placentinos en el Pabellón de Chapín. Ya abandonaron el Ontario Lett y Trenton Wurth, pero siguen esperanzados de que les llegue una ayuda jugadores de la calidad del base uruguayo con pasaporte italiano Bavosí, el escolta ex del Calpe Víctor Pérez, máximo anotador, el pívot Pablo Almazán, el canadiense Nicholas Maglisceau o el croata Marko Sekulic.

El Jerez es el décimo clasificado y curiosamente es el equipo con más valoración de la liga y en su parquet han caído gallitos como Palencia, Tarragona y Caja Rioja. El Plasencia, mientras, a volver a la buena senda.