PLASENCIA GALCO: Mark Zoller (20), Rubén Ibeas (13), Nacho Fort (9), Mario Fernandes (10) y Jason Blair (9) -cinco inicial- Juliá Garrote (2), Quique Suárez (8), Dominick Martin (0) y Conejero (9)

ILLESCAS URBAN: Virgil (8), Carlos Martínez (2), López (8), Lyons (15) y Jiménez (5) - cinco inicial - Charquero (2), González (0), Sancho (0), Moore (17) y Alonso (16)

ARBITROS: J. María Pérez y Oscar Salvador. Eliminaron a Juanín Jiménez (min.38)

MARCADOR POR CUARTOS: 20-21, 45-36 (descanso), 59-55 y 80-73 (final)

INCIDENCIAS: Jornada 31 de LEB Plata.

En un ambiente excepcional conseguía ayer el Plasencia una importantísima victoria ante uno de los favoritos al ascenso y ante el equipo que puede cruzarse en un hipotético playoff, que los placentinos tienen más cerca, aunque aún no agarrado.

La canasta inicial fue de Rubén Ibeas, y eso significaba mucho, ya que tras una mala racha del alero, anoche se marcó un primer cuarto imponente, anotando 10 puntos en este periodo, puntos que necesitaba su equipo, pero que quizás eran más importantes para espantar los fantasmas que le atosigaban. Nacho Fort también entraba en el quinteto inicial, en detrimento del capitán Jorge Lledó que no disputó un solo minuto, circunstancia que aprovechó también Mark Zoller para realizar su mejor partido de la temporada. Los compases iniciales fueron parejos y el 20-21 con el que acabó el primer cuarto daba una muestra de que, como vaticinaba Ñete, su equipo iba a dar el 120%.

ENTONADO El segundo periodo comenzó con cinco puntos consecutivos de Conejero, que a pesar de su fascitis sigue dando todo por el equipo, y que si anoche pudo jugar fue gracias al trabajo del incansable Felipe que continúa haciendo milagros. Minuto a minuto los placentinos fueron creyendo que no son inferiores a nadie y consiguieron ampliar la ventaja hasta los 11 puntos (45-34), una canasta sobre la bocina de Dexter Lyons puso el 45-36 con el que ambos equipos se fueron a vestuarios.

Ñete repitió cinco inicial, dándole los mandos a Fernándes, que a pesar de irse con cero puntos al descanso supo serenar a los suyos y se convertiría en protagonista de esta segunda parte donde Plasencia supo manejarse en las ventajas de la decena, incluso Ibeas acertó con un triple desde más allá de siete metros, tras una canasta de Nacho Fort que puso el 59-49 a falta de poco más de un minuto para el final del cuarto, nadie podría presagiar los nervios que llegarían.

Entre el final del tercer periodo y el comienzo de la parte final, los de Javi Juárez endosaron un parcial de 0-12, que colocaron el electrónico en un preocupante 59-61 ante la algarbía de los más de 200 aficionados manchegos que ocuparon un fondo, pero en estas estábamos cuando apareció la escondida artillería local, porque un 9-0, merced a tres triples seguidos, dos de Zoller y el tercero de Suárez, colocaron tierra por medio y la alegría se traspasó a la afición placentina que vivió el tramo final como una apoteosis ya que su equipo había vuelto. La férrea defensa placentina sirvió también a la causa. El 80-73 final demostró que Plasencia puede ganar a cualquiera.

A la conclusión del partido, Ñete Bohigas reconoció: "Me alegra el triunfo sobretodo porque hemos vuelto a encontrar esa comunión del público con el equipo. En esta cancha con esta afición es difícil ganar para cualquiera. Tácticamente hemos jugado perfecto".