Cáceres tendrá mañana nuevo alcalde y una de las cuestiones que podría tener sobre la mesa es la transformación del Príncipe Felipe en un estadio Municipal, «que es lo que debe tener esta ciudad, como la mayoría de ciudades de España», aseguró ayer Carlos Ordónez, presidente del Cacereño, durante la presentación de Julio Cobos como nuevo entrenador. El dirigente verde, que ha comprado casi el cien por cien del paquete accionarial y también el estadio, dijo, reconoció que esa es una de las propuestas que barajan plantearle al nuevo equipo de gobierno. No será la única de una entidad que reclama no solo la ayuda de las instituciones, sino también de los aficionados y las empresas para seguir avanzando.
El estadio es una de las grandes ‘losas’ del club. El elevado coste de mantenimiento le ha impedido históricamente destinar ese dinero a conformar plantillas más competitivas. Necesita actuaciones en casi todos los aspectos, aseos, vestuarios e iluminación, un aspecto que condiciona los horarios de los partidos. «Si el Cacereño quiere jugar Copa del Rey en noviembre debe tener luz», añadió Luis Puebla, director general. «Se está intentando solucionar este problema, no de ahora, ya desde hace un tiempo», apuntó Ordóñez, que no se atrevió a dar una fecha exacta en la que este problema podría estar arreglado.
