Definitivamente, el Extremadura ya conoce el diagnóstico exacto de su enfermedad esta temporada: la falta de gol. Las causas para llegar a este grave problema que está lastrando a los azulgranas pueden ser varias, todas dignas de analizar, pero lo que ya ha quedado más que patente es cuál es el problema que explica la mala dinámica de resultados de los azulgranas y, lo que es peor, su mala posición en la tabla: penúltimo con 22 puntos, en puesto de descenso.

El problema afloró en toda su dimensión el pasado fin de semana ante el Almería. El Extremadura, que cuajó futbolísticamente uno de los mejores partidos de la temporada, completó hasta 21 remates durante el partido. Por poner un ejemplo, fue el que más remató durante toda la jornada 24 en la Segunda División, por encima de los 19 remates del Sporting de Gijón o los 17 del Albacete. Además, entre palos también realizó hasta nueve disparos, el que más de toda la jornada por encima de los cinco de Ponferradina, Rayo Vallecano o Elche.

«No podemos hacer más para ganar un partido. Hemos hecho una de las mejores primera parte del año, pero la crueldad de la derrota es tremenda. Está claro que solo nos ha faltado marcar gol para ganar», admitía en sala de prensa un cariacontecido Manuel, que ya no sabe cómo tapar esta carencia en su equipo.

Los números no engañan. De los cuatro delanteros puros que tiene el Extremadura en su plantilla, solo dos han marcado: Willy (dos goles) y Airam Cabrera (un gol). En total, tres goles en 24 partidos. Si además se le quisiera sumarle también a Pinchi, que ha ejercido de delantero muchos partidos, los números serían los mismos, ya que el gallego tampoco ha visto portería, como le ha ocurrido a Alex López y a Rafa Mujica. Este último falló de manera incomprensible un gol cantado para empatar ante el Almería en el último suspiro. Lo mandó arriba con todo a favor dentro del área pequeña. La frustración fue tan atroz, que Mujica abandonó entre lágrimas el estadio Francisco de la Hera.

Los números no engañan. El Extremadura lleva 20 goles a favor en lo que va de temporada, siendo el tercer equipo menos realizador de la liga. Todavía Albacete (con 17) y Málaga (con 19) tienen peores números realizadores, pero sin embargo están bastante por encima en la tabla de clasificación.

Pero aún hay más. El Extremadura ha realizado un total de 238 remates en lo que va de competición. El dato lo sitúa entre los cinco que más rematan de la competición y por encima de la media de remates por equipo que está situada en 210. Es decir, que el Extremadura realiza casi 10 remates por partido para buscar el gol. Y ojo, necesita hasta 12 remates para marcar un gol.

«Yo no puedo controlar el tener ocasiones y fallarlas porque eso es una cuestión de acierto. Solo puedo decir que el camino que hemos trazado es claro y, aunque pueda sonar como un mensaje en el aire, así van a llegar las victorias. De esto estoy convencido», dice Manuel, un hombre que no pierde la esperanza.

REFUERZOS / Ni los datos ni la realidad pueden pasar desapercibidos para la dirección deportiva del Extremadura, que busca desesperadamente fichajes en el mercado de invierno. Por supuesto, un delantero. O dos, posiblemente. «Está claro que hace falta que nos refuercen en la parte delantera. Sé que el club está trabajando, pero nuestro mercado sabemos que es difícil y no podemos traer algo por traer», señala Manuel, que es más amigo de la calidad que de la cantidad.

Antes de saber cuáles son los posibles refuerzos, el Extremadura sigue trabajando en la operación salida. El club espera acordar la salida de Airam Cabrera, aunque el tema del canario no es fácil. Su alta ficha dificultan su salida, aunque se está viendo otra posible cesión. También queda por saber si Rafa Mujica, que está cedido por el Leeds United, terminará el año de azulgrana.

En lo referente a futuribles, a falta de que se oficialice el regreso de Olabe, la opción de Asier Villalibre, del Athletic, sigue estando sobre la mesa. También ha sonado con fuerza la posibilidad de que Fede Piovaccari, actualmente en el Rayo Vallecano, acabe de azulgrana.

Lo que sí parece claro es que al Extremadura le está costando moverse en el mercado de fichajes. Por varios motivos. Por su poco límite salarial. Por haberse movido tarde. Y porque tiene que esperar a movimientos de equipos más pudientes para aprovechar otras opciones.

Mientras esto ocurre, el equipo descansa hasta el miércoles. Los de Manuel Mosquera volverán para preparar el partido del domingo en Vallecas, ante el Rayo, a las 18.15 horas.