Me gustaría ver a este equipo en una situación normal, en la misma que tienen los otros diecisiete de la liga. Ese es mi único deseo". Manolo Hussein tiene plena confianza en la calidad de los jugadores del Cáceres, pero lamenta que todos los agobios económicos han supuesto un freno respecto al nivel real que puede ofrecer.

Sin embargo, el entrenador canario celebra que la calma haya aparecido casi por primera vez en toda la temporada y haya aplacado las intenciones de deserción de algunos miembros de la plantilla. Ayer el equipo recuperó la sonrisa y en el entrenamiento de ayer los jugadores se confabulaban para agradecer al presidente su esfuerzo con una victoria importante frente al Auna Canarias mañana a partir de las 12.30 horas.

"Esta semana hemos estado en una situación límite, incluso he visto a algunos jugadores pasar la frontera de la paciencia hasta llegar a la ansiedad. Tenemos que recobrar la tranquilidad y ser un equipo de baloncesto que sólo se preocupe en entrenar", reconoce también el entrenador verdinegro.

SIN CONCENTRACION

"Llevamos mucho tiempo con la cabeza ausente y más pendientes de cuestiones extradeportivas, comprensible por otro lado, pero que nos restaban energía y concentración", apunta el canario.

Tanto Ariel Eslava como Hurl Beechum, dos de los jugadores que durante la semana han estado con pie y medio fuera del Cáceres, respiraban ayer en el entrenamiento vespertino. "Yo sí había pensado en irme. Tenía una oferta de un club alemán y todo estaba muy adelantado. Sólo faltaba mi firma", reconoce en voz alta Eslava.

El hispanoargentino coincide con el alero alemán y con el propio técnico en que la pérdida de Vladimir Petrovic resulta "importantísima", pero afirma que el equipo saldrá a dar el cien por cien ante el Auna.

Beechum siente que no pueda contar más con su compañero, pero respeta su decisión. Al mismo tiempo tiene "hambre de victoria", según él mismo dice.

Por su parte, Hussein hace encaje de bolillos para que la baja del alero resulte lo menos perjudicial posible en el encuentro ante su exequipo y a partir del lunes examinará la contratación de un posible sustituto. "Vamos a darnos un poco de tiempo y habrá que ver cómo está la economía del club", afirma sin entrar en detalles.

"Ha sido una situación de incertidumbre por no saber lo que iba a pasar. En la pista hemos vivido una tensión que no era la aconsejable para poder competir. Ha habido entrenamientos en los que han faltado jugadores y encima perdemos a alguien que forma parte del cinco inicial a dos días antes del partido", resume Hussein.

AUSENCIA DE MUONEKE

La única baja durante la sesión de ayer fue la ´Gabriel´ Muoneke, que ya se ha recuperado de la gastroenteritis sufrida el pasado fin de semana, pero que que no se ejercitó con sus compañeros por "un malentendido" sobre la hora del entrenamiento. Por supuesto: nadie quiere ni pensar que se produzca otra deserción en las filas cacereñas.

Por otra parte, como anécdota, en el entrenamiento del jueves una niña de cuatro años cayó desde la grada al parquet. Afortunadamente, la pequeña no sufrió daños de consideración.