El alemán Jurgen Klinsmann es despedido de la selección de Estados Unidos poco después de llamar "ignorantes" a los críticos que pedían su cese a través de una entrevista publicada por el 'The New York Times'

El ya exseleccionador se pasó toda su etapa como entrenador del combinado estadounidense afirmando a Gulati, el presidente de la Federación de Fútbol de Estados Unidos, que su proyecto podía hacer crecer el fútbol en el país y convertirse en uno de los referentes del deporte en América pero el único título que cosechó fue la Copa Oro de la Concacaf en 2013.

En el Mundial de Brasil fueron eliminados en cuartos de final, en la Oro de 2015 no pasaron del cuarto lugar, no se clasificaron para la Copa Confederaciones de 2017 y en la Copa América Centenario también fueron cuartos gracias a las bajas y problemas de los otros equipos porque su nivel no fue nada bueno.

Sunil Gulati dio la noticia del cese del alemán al frente del combinado nacional. "Seguimos confiando en que tenemos jugadores de calidad para clasificar para Rusia 2018, pero el crecimiento del equipo hasta este punto nos ha convencido de que tenemos que ir en una dirección diferente", afirmó el presidente de la Federación antes de calificar de "fracaso" el proyecto de Klinsmann.

PRESCINDIR DE LA LEYENDA

Al alemán se le critican muchos aspectos pero quizás el mayor de ellos fue apartar a Landon Donovan de la selección. El máximo realizador de la historia de Estados Unidos fue rechazado por Klinsmann en favor de jóvenes que ya jugaban en Europa. Bruce Arena, exitoso exseleccionador estadounidense le criticó con dureza por ello y Bradley, también exentrenador del combinado, le acusó de buscar su cargo cuando él entrenaba a Estados Unidos con "una crítica destructiva" a sus equipos.

Mientras, Klinsmann dejó claro en 'The New York Times' que no sufría por su puesto porque los que le criticaban eran unos "ignorantes". Además, cargó suavemente contra Gulati y le avisó que actuar de forma emocional en el fútbol podía convertir todo el proceso de desarrollo del deporte en Estados Unidos en una "montaña rusa" de efectos negativos. El presidente hizo oídos sordos de las palabras del alemán y convirtió su paso por la selección en historia.