Habrá continuación a finales de mes, cuando llegue lo realmente bueno: la fase de ascenso a Liga Femenina. Pero mientras tanto, el indiscutible campeón del grupo A la LF-2, el Al-Qazeres Extremadura, recibe al Adareva de Tenerife (19.00) en el final de la liga regular, un partido que se jugará en un nuevo escenario, el pabellón Multiusos, en vez de en el Serrano Macayo, donde ha jugado toda la temporada y donde rematará con la fase de ascenso.

Aunque deportivamente haya poco en juego, desde el club extremeño esperan que la afición vuelva a estar con el equipo en un partido con entrada gratis y la posibilidad de aportar una cantidad a beneficio de la Red Solidaria Popular.

El equipo de Jacinto Carbajal se tomará muy en serio el choque. Hay que ponerse a punto de la mejor manera posible para llegar al momento definitivo en forma. Las lecturas y el trabajo de las últimas semanas van encaminadas a ese objetivo. No puede haber otras sensaciones. "Hay que aprovechar este último test para no perder el ritmo de competición. La mejor forma de llegar bien a la fase es compitiendo todos los partidos", apuntó el preparador.

Además, hoy se conocerán definitivamente los ocho equipos que disputarán la fase de ascenso. A partir de ahí, empezará la cuenta atrás para un Al-Qazeres especialmente ilusionado y concentrado en lo que se le viene encima.

El Al Qazeres ha recuperado esta semana a Jovana Vidakovic, ausente en los últimos partidos por motivos personales.

Jugar la fase de ascenso en casa "es positivo", apuntó Carbajal, que recordó que en el Serrano Macayo no han perdido en toda la temporada. "Que sea aquí es motivo para estar muy contentos y la noticia ha caído muy bien", reconoció Carbajal, que cree que será distinto a como fue hace dos años, cuando también jugó en casa y se quedó a las puertas del ascenso.