El día no pudo ser completo para Rafael Nadal. Él cumplió su trabajo para intentar clasificarse para las semifinales de la Copa Masters al imponese en una batalla de casi tres horas al griego Stefanos Tsitsipas por 6-7 (4-7), 6-4 y 7-5. Pero además de su victoria necesitaba que Alexander Zverev perdiera con Daniil Medvedev. Y eso no sucedió. El alemán no deje escapar su oportunidad y se impuso al ruso por 6-4 y 7-6 (7-4). Nadal se marcha hoy mismo a Madrid para incorporarse a la Copa Davis mientras Zverev se enfrentará en las semifinales a Roger Federer y Tsitsipas a Dominic Thiem.

Nadal se queda una vez más sin opciones en el torneo, pero se marcha de Londres con un buen premio. No era el objetivo de la temporada. Lo decía en enero y lo ha repetido todo el año. Pero ayer Rafael Nadal mordía feliz y orgulloso bajo los focos del O2 Arena de Londres el trofeo que le acredita como número 1 mundial por quinta vez en su vida. «Quién iba a decirlo? Me siento súper feliz. Jamás podía imaginar que a los 33 años volvería a tener esta copa en mis manos, después de las lesiones y todo lo que he pasado», decía al público el tenista mallorquín acompañado por el presidente de la ATP, Chris Kermode.

DUROS MOMENTOS / Nadal acaba el ejercicio primero después de haberlo conseguido en los años 2008, 2010, 2013 y 2017. Ningún otro jugador en la historia ha logrado llegar a la cima con una diferencia de 11 años desde la primera vez y tampoco ninguno en cinco años no consecutivos. El tenista mallorquín iguala a Jimmy Connors, Roger Federer y Novak Djokovic, que lo han logrado también en cinco ocasiones. Por delante de ellos solo está Pete Sampras que lo hizo seis veces y seguidas de 1993 a 1998.

Mientras Nadal veía en la gran pantalla un vídeo de sus mejores éxitos de la temporada seguramente por su cabeza pasaron los duros momentos de un año complicado, en el que no veía la luz y en el que tras el torneo de Montecarlo llegó a pensar en la retirada, al menos temporalmente. Solo su espíritu de lucha y el apoyo de sus técnicos y su familia le permitieron continuar en busca de soluciones.

LA COPA DAVIS / Y ayer lo admitió. «Siento una satisfacción especial por un año complicado en el que no sacaba cabeza y acumulaba decepciones, una de las últimas ante Tsitsipas, su rival ayer, con quien perdió en el Masters 1.000 de Madrid. Todo cambió con su victoria la semana siguiente en Roma y el 12º Roland Garros. Desde ese momento Nadal recuperó su mejor juego para cerrar la temporada en la cima del circuito con la victoria en Montreal y, especialmente, el Abierto de EEUU.

El número 1 ha sido la guinda a un gran año en el que Nadal destaca por encima de todos sus éxitos el hecho de ganar en Nueva York . Al tenista balear aún le queda trabajo por hacer en la Copa Davis en la que Sergi Bruguera y sus compañeros de equipo Roberto Bautista, Pablo Carreño, Feliciano López y Marcel Granollers le esperan con ganas para debutar el próximo martes ante Rusia.