Entre las 50 mujeres que tomarán parte hoy en la competición femenina de triatlón en la bahía de Vougiamieni se encuentran la gallega Pilar Hidalgo, la donostiarra Ainhoa Murua y la madrileña Ana Burgos. Ellas serán las primeras en examinar al triatlón español, que llega rebosante de optimismo a la cita de Atenas, sobre todo por la presencia de una de las estrellas de este deporte, el gallego Iván Raña, que competirá mañana con la intención declarada de pelear por el oro. "Preveo una carrera muy dura, y si gano cualquier medalla, estoy seguro que me alegraré", asegura.

Después de su inclusión en Sydney como deporte oficial, el triatlón, una combinación de natación (1.500 metros), ciclismo (40 kilómetros) y carrera (10 kilómetros), que define al atleta completo, integrará por segunda vez el programa olímpico. Hace cuatro años, apenas se tenían referencias de un chico de 21 años nacido en Santiago que acabó quinto en la final olímpica. Hoy en día es difícil que no haya nadie que no conozca a Raña: campeón del mundo y dos veces campeón de Europa.

Raña es "un crack , uno de los mejores del mundo", en palabras de sus propios compañeros. Y, a su estela, han ido madurando nuevos valores, hasta el punto que España está incluida entre los candidatos al podio.