La Real Sociedad, que este domingo recibe en San Sebastián la visita del Real Madrid con la baja de Gabi Schürrer y la duda de Xabi Alonso, estará arropada por una afición que abarrotará Anoeta después de agotar en tan sólo tres horas las entradas, que hoy se ponían a la venta.

El aficionado donostiarra ha percibido con nitidez el mensaje lanzado por la plantilla de que esta jornada el equipo puede tener la última posibilidad de reconquistar el liderato, y es que una victoria colocaría a los donostiarras a sólo tres puntos del conjunto de Vicente del Bosque, mientras que un resultado contrario les alejaría a 9 puntos.

LA DUDA DE ALONSO

El conjunto que entrena el francés Raynald Denoueix tendrá para este encuentro la baja de Gabi Schürrer, que sigue su proceso de rehabilitación tras una intervención en la rodilla, pero ahora la preocupación está en recuperar a Xabi Alonso, quien sufre unas molestias en el abductor de su muslo derecho, que ayer le impidieron entrenarse al mismo ritmo que sus compañeros.

El jugador, que la pasada semana disputó dos encuentros con la selección sub-21 en la que fue uno de sus hombres más destacados, se mostró cauto sobre su concurso y comentó tras el entrenamiento que tuvo lugar en Zubieta que "nadie quiere perderse este partido pero quedan todavía otros nueve y a veces es preferible no forzar, que hacerlo y estar luego parado o a disgusto más jornadas".

Alonso, que se congratuló del apoyo que tendrá el equipo por parte de la afición, destacó también la importancia de lograr una victoria ante un Real Madrid lanzado.