Real Madrid y DKV Joventut por un lado y Tau Vitoria y Winterthur Barcelona por otro dirimen hoy qué dos equipos serán finalistas de la Liga ACB a partir del próximo domingo.
Cuatro puntos de diferencia, en ambas ocasiones con 72-70 en el marcador, han otorgado al Real Madrid el par de victorias que necesitaba para jugar hoy (21.00, La 2) el desempate de la semifinal contra el DKV Joventut, que ahora se juega la final y el billete para la Euroliga.
En esta situación, con 1-2 después de que los verdinegros lograsen poner la clasificación a tiro en el tercer choque con el cuarto en casa y de que el Madrid forzase el encuentro defintivo, los antecedentes sonríen a los blancos.
La igualdad realizadora es una de las notas destacadas de esta serie semifinal, así que cabe esperar otro duelo al máximo, con poca diferencia en el marcador, mucha intensidad y dos equipos volcados.
"El DKV Joventut ya nos ha ganado una vez en casa en estos ´playoffs´ y estamos mentalizados para que no se repita. En un quinto partido todo es posible, pero sabemos que nos jugamos todo y hemos trabajado muy duro a lo largo de la temporada para que ahora se nos escape", declara el pívot madridista Sekulic.
En el lado verdinegro, Charles Gaines aún no ha vuelto al nivel anterior a su lesión en el cruce de cuartos y el equipo lo nota en el apartado reboteador; Rudy jugó muy mermado el último partido (14 minutos y anotó 3 puntos) y se notó que aún no estaba recuperado del tremendo golpe en el costado del partido anterior y Robert Archibald también se lesionó en un hombro, aunque pudo acabar el partido.
TAU-BARÇA Vitorianos y catalanes se jugarán el pase en el Bruesa Arena. Los pupilos de Bozidar Maljkovic tendrán que hacer frente, a partir de las 20.45, a unas estadísticas contrarias, tras haber perdido hasta ahora todos los quintos encuentros de los ´play off´ ACB que han jugado, ante el Estudiantes (2003-04, semifinales), el Real Madrid (2004-05, final) y el Unicaja Málaga (2002-03, cuartos de final).
"Estamos ante el quinto partido de la serie, y ya no va más: el que gane, pasará a la final; y el que pierda, se irá fuera, de vacaciones. Por tanto, ya no hay mucho más que analizar, porque la serie está muy clara, y sólo se puede añadir que el de mañana va a ser un choque durísimo", resume Luis Scola.
El proyecto azulgrana se juega su credibilidad y quizá su continuidad con Dusko Ivanovic en el banquillo, obligado a vencer para disputar la Euroliga de baloncesto la próxima temporada.
Una plantilla del presupuesto de la azulgrana no puede quedarse fuera de la máxima competición continental. Ivanovic se aferra una vez más a la defensa como clave de una presencia en la final que parece obligada para sacar adelante sus ideas.
