A falta de cuatro días para su estreno liguero ante el Atlético, los dirigentes y el entrenador del Real Madrid no tienen nada claro el camino a seguir. Ahora la solución es Diego Milito, el goleador del Zaragoza, por el que el club blanco tendrá que pagar los 25 millones de su cláusula de rescisión. Bernd Schuster ha llegado a la conclusión de que lo más importante en estos momentos es devolver al equipo blanco la pegada que parece haber perdido. Con Van Nistelrooy todavía en fase de rodaje tras la dilatada recuperación de la lesión muscular sufrida en el último partido de la pasada Liga y Raúl, Saviola y Soldado secos, la mayor urgencia son los goles.

De los tres tantos marcados al Sevilla el pasado domingo ninguno correspondió a los delanteros. Schuster se mostró después más preocupado por la falta de ocasiones generadas durante la pretemporada que por la fragilidad defensiva que vuelve a exhibir el conjunto madridista. Así que ha hecho ver que lo primero es fichar otro goleador. El elegido es Diego Milito.

El Zaragoza no conoce el interés madridista de forma oficial, pero en cualquier caso se remite a la cláusula, de 25 millones de euros.

Mientras tanto, la operación salida continúa en el Santiago Bernabéu. Ayer se conoció el traspaso de Emerson al Milan por cinco millones de euros, una cifra muy inferior a lo que costó hace un año.