Despreciado por los dirigentes y el entrenador del Madrid, Ronaldo está a punto de sellar su pase al Milan después del acuerdo al que llegaron ayer los dos clubs. La entidad madridista recibirá por el traspaso del goleador brasileño siete millones de euros, muy lejos de los 18 que ofreció el propio club italiano el pasado verano y que entonces rechazó. Con la marcha de Ronaldo y la anunciada de Beckham para final de temporada, el Madrid liquidará la nómina de galácticos coleccionada por Florentino Pérez.

Último entrenamientoEl delantero brasileño se entrenó ayer por la mañana a las órdenes de Fabio Capello por última vez. Por la tarde viajó a la capital lombarda y hoy se someterá al pertinente reconocimiento médico. Si lo supera, firmará el nuevo contrato el lunes que viene, según confirmó Leandro Cantamessa, abogado del Milan.

Ronaldo perderá así de vista a un técnico que nunca le quiso para su proyecto y que no ha dejado de menospreciarle, dudar de su profesionalidad y llamarle gordo durante los cinco meses en que se han visto forzados a convivir. Ahora, con 30 años y casi 10 kilos menos que a principios de temporada, se marcha al Milan con el objetivo de relanzar una carrera que los responsables madridistas parecían empeñados en liquidar pese el perjuicio económico que les supone esa actitud.

El Milan ofreció a mediados de julio 18 millones de euros, una cantidad que el Madrid se mostró dispuesto a aceptar si conllevaba una opción sobre Kaká. El club milanista no tragó y Adriano Galliani llegó a llamar "bandolero" a Calderón por tocar a la estrella milanista al margen del club. Las negociaciones cambiaron de dirección y el nuevo interlocutor fue el Inter. Capello quería un intercambio con Adriano. Las conversaciones llegaron hasta el día de cierre del mercado, pero el Inter solo se planteaba desprenderse de Adriano en calidad de cedido.

Negocio ruinosoCinco meses después, la testarudez de Capello obliga al Madrid a deshacerse de Ronaldo en una operación de nula rentabilidad comercial, pese a que el Milan se hace cargo de su ficha por lo que queda de temporada y la que viene --un total de nueve millones de euros limpios-- y respeta todos los compromisos comerciales acordados por el jugador.

Según un reciente estudio de la Universidad de Navarra, sin embargo, el goleador brasileño supone un potencial de ingresos para el Madrid de 42 millones de euros, cifra superior incluso a la cuota del mediático Beckham, de unos 40 millones.