Borrón y cuenta nueva. El Cacereño quiere remendar ante el Alcalá (20.30 horas, Príncipe Felipe) su tropiezo del pasado domingo ante el filial rojiblanco y terminar el año con una victoria que ayude a comenzar el 2011 con la moral a tope y como el mejor de los equipos extremeños, algo impensable hace poco más de mes y medio, cuando el conjunto verde cerraba el Grupo I de Segunda B.

Pero la tarea no será nada fácil, pues enfrente tendrá a un rival que ha encontrado su mejor fútbol y el camino del gol: ocho en dos partidos.

José Luis Montes volverá a confiar en su once tipo --"si algo funciona, para qué hacer cambios", ha reiterado en más de una ocasión el segoviano--, los jugadores que le han llevado a conseguir una triunfal racha que se vio truncada ante el Atlético B pero que hoy quieren volver a reiniciar.

Rai, al que se espera para el mes de enero como si de un fichaje de invierno se tratara, será la única baja de Montes, que deberá ver el partido desde la grada tras ser sancionado con dos encuentros. El técnico confía en no repetir los errores tanto defensivos como ofensivos que le han costado su primera derrota desde que viste de verde.

Pero el gran problema puede ser el césped del Príncipe Felipe. Su lamentable estado desde que comenzó la Liga ha ido empeorando partido a partido y después de las abundantes lluvias del martes y de ayer puede estar muy blando, lo que hará más pesado el choque para los jugadores. Pero este será un mal que sufrirán ambos equipos.