Ha tenido suerte. Dentro del caprichoso y apretado calendario de la NBA, José Manuel Calderón está pudiendo pasar estas fechas al lado de su esposa, Ana, en su casa de Toronto. El viernes por la noche jugó con los Raptors en San Antonio ante los actuales campeones (digna derrota por 95-90), anotando 7 puntos y dando 5 asistencias en 21 minutos de juego.

El extremeño de la liga norteamericana está disfrutando de un pequeño descanso y además ha tenido en las últimas semanas la visita de sus padres, que llegaron desde Villanueva de la Serena. El no podrá regresar hasta abril, cuando termine la competición regular. La NBA es tan exigente que incluso ayer se jugaron dos partidos, uno de los cuales fue protagonizado por los propios San Antonio Spurs en Detroit Pistons. Precisamente este equipo es el rival mañana en Toronto para los Raptors.

En sus declaraciones públicas, Calderón sigue dando un ejemplo de paciencia y optimismo, pese a que su equipo es el peor de la competición con seis victorias en 27 partidos. "Tenemos que seguir luchando para avanzar por el buen camino y creo que al final vamos a ser un equipo ganador", aventura. En el fondo sabe que acertó con la elección de Toronto, un equipo que le está dando protagonismo y minutos. Su promedio de 29, aunque en San Antonio sólo estuvo en pista 21 y no fue titular. Enfrente estuvo uno de sus referentes: el francés Tony Parker, con el que suele protagonizar igualados duelos cuando se enfrentan en la selección.

El otro español en la NBA, Pau Gasol, sigue fuerte. Anotó 19 puntos y capturó 11 rebotes en el triunfo de Memphis sobre Chicago (95-77).