Aunque España se encuentra prácticamente clasificada para la segunda fase (solo un casi imposible triple empate con Turquía y Polonia podría dejarla fuera), tanto el técnico Sergio Scariolo como los jugadores solo se plantean hoy el triunfo en el difícil examen frente a la anfitriona Lituania (20.00, La Sexta), conscientes de que los resultados de esta primera fase se arrastrarán para la segunda fase y determinarán el decisivo cruce de los cuartos de final.

"A partir de ahora, ya no hay bromas que valgan. Queremos pasar a la segunda fase como primeros de grupo y para eso tenemos que ganar estos dos partidos que nos quedan", explicó ayer Fernando San Emeterio, el jugador del Caja Laboral, expresando el sentir general del vestuario español, en referencia tanto a la cita de esta noche como al encuentro de mañana frente a Turquía.

"Sabemos que ahora llega lo difícil y que tendremos que estar muy mentalizados", remarcó también Rudy, con palabras similares a las pronunciadas por el líder del equipo, Pau Gasol.

El seleccionador español, Sergio Scariolo, por su parte, habló en términos muy elogiosos sobre la selección lituana, la única que derrotó a España en la fase de preparación, en un amistoso en Kaunas, y que en Panevezys contará con el respaldo de una afición muy apasionada.

Lituania llega sin un referente claro (la lesión de Kleiza lo ha dejado sin su principal estrella pero se trata de un equipo en el que todos los jugadores pueden aportar: frente a Turquía, los jugadores de banquillo sumaron 33 de los 75 puntos del equipo) y ha recuperado a tres veteranos como Jasikevicius, Songaila y Kaukenas, ausentes en el Mundial del año pasado.

"Es un equipo fortísimo, de por sí y que además estará arropado por el público", dijo Scariolo. "Ya hemos vivido lo que es y a nivel físico tendremos que recuperarnos y estar bien, porque es un equipo que te produce mucho desgaste por la intensidad y el ritmo que despliegan".