El delantero brasileño Robinho reiteró ayer que quiere cambiar el Santos por el Real Madrid, al que definió como "el mejor club del mundo", y espera que la dirección de su equipo resuelva cuanto antes su transferencia. "Quiero jugar en el Real Madrid. Quiero salir del Santos y pretendo resolver eso rápido. No tengo cabeza para jugar más aquí", manifestó el ariete de 21 años en una rueda de prensa en Sao Paulo. Robinho subrayó que si de va de Brasil sólo será para jugar en el Real Madrid, club que desde hace meses busca su fichaje, trabado a

última hora por diferencias financieras, pues el Santos pide el doble de los 25 millones de dólares ofrecidos por el equipo español. "Sólo salgo si voy para el Real Madrid. Si no salgo ahora, voy a cumplir mi contrato hasta el fin", dijo el jugador, con cierta resignación, consciente de que el Santos no está dispuesto a dejarlo partir alegremente. Robinho fue revelado en las divisiones inferiores del Santos y su contrato con el club expira en 2008. La semana pasada Robinho llegó a mandar un mensaje de despedida para la afición del Santos, pero ayer señaló que no está en sus planes enfrascarse en una batalla legal con el club para que lo traspase al Real Madrid. "No pretendo acudir a la FIFA por gratitud con el Santos", anotó el jugador, considerado como la gran revelación del fútbol brasileño en los últimos años. Robinho recordó que la dirección del Santos le prometió en octubre del año pasado que no dificultaría su fichaje por el Real Madrid, y espera que el presidente del club, Marcelo Teixeira, decida rápido su situación. "Espero que el presidente cumpla su promesa. Quiero salir de Brasil. Creo que este es mi momento", agregó el delantero, quien el domingo no jugó en el partido que su equipo empató sin goles con el Juventude. El jugador brasileño recordó también que el club se había comprometido a autorizar su transferencia cuando terminase su participación en la Copa Libertadores.