El suizo Roger Federer dejó patente su condición de número uno del mundo y las distancias que le separan del resto, tras superar, con autoridad y contundencia, al español Tommy Robredo (7-5, 6-2 y 6-2), al que apartó de los cuartos de final del Abierto de Estados Unidos.

El tenista helvético, empeñado en ampliar los signos de identidad que le han erigido como la raqueta más laureada de la historia, aceleró el paso en el duelo contra el español. En la entrada en la segunda semana del torneo ya suma 38 victorias seguidas en Flushing Meadows

Lejos de la flexibilidad que mostró Federer con sus primeros adversarios, con el estadounidense Devin Britton, el alemán Simon Greul o el australiano Lleyton Hewitt, con el que se dejó un set, decidió dar un paso al frente en su nuevo recorrido hacia la conquista de su sexto Abierto de Estados Unidos consecutivo.

El juego previo de Robredo había alentado sus expectativas. Sobre todo después de liquidar al estadounidense James Blake, en tres sets, ante su público. Un rival que siempre le creó contratiempos. Y que recientemente siempre le había ganado.

No es el caso de Federer. El helvético es inaccesible para Robredo, con el que ha perdido en ocho de las nueve veces que han jugado. Las últimas.

El tenista español plantó cara a su rival en los primeros juegos del primer set, pero ya nadaba a contracorriente. Resolviendo de mala manera los juegos al servicio. Federer dio la sensación de que en cuanto quiso rompió el partido. Rompió en el undécimo parcial, consolidó y encarriló el encuentro y Robredo ya no pudo hacerle frente. Federer se enfrentará en cuartos de final contra el sueco Robin Soderling.

NADAL Y FERRERO Una sobrecarga abdominal, que le impide, sobre todo, servir con normalidad además de condicionar otros movimientos, lleva a maltraer al español Rafael Nadal, sometido otra vez a restricciones físicas a la hora de afrontar la acometida del último Grand Slam de la temporada.

Las dolencias que padece el jugador, reabiertas públicamente tras ser atendido en el duelo contra Nicolás Almagro, coartan la realidad de las expectativas de Nadal en Nueva York, que ayer se entrenó sin forzar en vísperas del enfrentamiento con el francés Gael Monfils, su próximo adversario en el camino hacia los cuartos del torneo. Mientras, Ferrero se las verá ante el argentino Martín del Potro.