Procedente de sus colaboradores más cercanos, Pedro Rocha recibió como primer regalo tras su reelección como presidente de la Federación Extremeña de Fútbol un montaje de vídeo con los mayores logros de su gestión en dos años y medio en el puesto, que desde ayer se verán prolongados hasta 2020. El fondo musical era la celebérrima canción 'The best', de Tina Turner. Nadie puede asegurar que él es 'el mejor' para el fútbol regional, pero sí el único: su renovación del cargo se produjo por aclamación al no existir ningún otro candidato.

Cáceres, su ciudad de nacimiento, acogió una asamblea general extraordinaria de apenas 20 minutos que no tuvo sobresaltos. Recibió unanimidad de felicitaciones y ninguna crítica. Los 50 asambleístas eran, como se había asegurado sotto voce , afines a Rocha, que tiene controlados los estamentos de clubs, entrenadores, jugadores y árbitros. Apelando al artículo 31.4 del reglamento electoral de la FexF, no hizo falta ni tan siquiera votar.

Rocha subió a la mesa satisfecho, entre aplausos, y se mostró agradecido al máximo. "Hemos pasado momentos muy difíciles, pero el que tiene que hablar es el fútbol. Cuando fui elegido, dije que venía a servir y no a servirme y eso es lo que voy a seguir haciendo", señaló, antes de hacer un pormenorizado análisis económico de cómo estaban las cuentas de la federación cuando él llegó y cómo están ahora. Se ha pasado de tener un saldo negativo de 6,1 millones de euros --contabilizando a la mutualidad-- a otro positivo de 1,5.

"La familia del fútbol merece toda nuestra ilusión y todo nuestro trabajo", apuntó Gerardo Hierro, el venerable presidente del Diocesano, que lideró la asamblea al ser el miembro de mayor edad.

Entre las filas de asientos en la sala de actos de la Cámara de Comercio estuvieron otros notables del pasado y el presente del balompié regional. Juntos se sentaron, por poner un ejemplo, el hacedor del Extremadura de Primera División en los años 90, Pedro Nieto, y el impulsor del Cerro de Reyes, Antonio Olivera Cachola .

En el ambiente estaba, eso sí, lo sucedido en el 2013, cuando fue elegido con polémica. La candidatura perdedora presentó una reclamación judicial por irregularidades que todavía no se ha resuelto. "No voy a a gastar ni un minuto en hablar de los que le quieren hacer daño al fútbol extremeño. Seré el primero en enfrentarme a ellos si quieren volver a hacerlo, porque no lo vamos a consentir", indicó.

Luego habló con los medios y respondió tajante sobre la misma cuestión: "Yo solamente voy a hablar de fútbol", espetó.

PROYECTOS El reelegido presidente se siente visiblemente más a gusto cuando tiene que mirar al futuro. "Tenemos que empezar un nuevo proyecto", reiteró. Utilizó varias veces la palabra "cimientos". Según su versión, se han puesto buenas bases estos años, pero hay que reforzarlas. "Lo más importante es que se ha visto el apoyo unánime de la gente", consideró.

Entre sus ideas está la ampliación del espacio dedicado a la mutualidad en la nueva sede central de la FexF en Badajoz. Para ello tendrá que utilizar la misma fórmula que ha aplicado: "Trabajar y ser como una hormiguita, controlando los gastos, lo cual es muy importante".

Es más que posible que haya novedades entre sus colaboradores más directos. "Quiero que haya una junta directiva con fuerza. Y darle más impulso a árbitros, entrenadores, clubs... En suma, a todos los ámbitos a nivel federativo", declaró.

A Rocha le falta todavía algo que sí lograron sus antecesores, que solo han sido dos en los últimos 40 años: Juan Espino Navia (1975-2007) y Juan de Dios Monterde (2007-2013): que la selección española absoluta masculina juegue en la región, ya sea en un partido de competición o amistoso. "Estamos intentando traerla desde hace tiempo y las expectativas son buenas", confesó. Obviamente, se depende la decisión de la Federación Española: "Exigen que el campo se llene, pero aquí eso lo vamos a tener fácil. La puerta está abierta". No hubo nombres de ciudades, pero hoy por hoy solamente los estadios de Badajoz, Mérida y Almendralejo reúnen las condiciones.