Ronaldinho jugó ayer su partido 200 con la camiseta azulgrana, en la victoria del Barcelona ante el Osasuna, aunque no entró al campo hasta el minuto 68, y se ha convertido así en uno de los extranjeros de la entidad que más ha vestido esos colores. Tras entrar por Messi, Ronaldinho ocupó la posición de delantero centro, donde una y otra vez esperaba el pase de sus compañeros, pero en los veintiséis minutos jugados el brasileño apenas aportó cosas.