Hubo una época en la que saltar de las motos a los coches era muy habitual, algo que intenta ahora, o en un par de años, el italiano Valentino Rossi, el doctor al que todo le parece poco y sobre el que nadie se atreve a pronosticar fracaso alguno. Alcanzada la marca del mítico Mike Hailwood, ganador de 76 grandes premios, Rossi prepara ya su más difícil todavía, al intentar convertirse en campeón de F-1.

Como el británico John Surtees, ganador de siete títulos mundiales de motociclismo en los años 50 y 60 y vencedor del Mundial de F-1 con Ferrari en el 64, el muchacho que se hacía llamar Rossifumi y más tarde Valentinik está dando ya los primeros pasos para que la scuderia le escoja como uno de sus pilotos en el 2007.

Y son pasos serios, muy serios. Demasiado como para tomárselos en broma. A Ferrari no le sabría mal pasar del rojo al amarillo, el color preferido de Rossi, que pronto conquistará su séptimo título mundial y alcanzará la misma cantidad de cetros que atesora Michael Schumacher en el gran circo.

Un auténtico examen

Surtees, que mantuvo una relación muy tensa con el mítico Enzo Ferrari, corrió 111 grandes premios de los que ganó seis. Rossi ha disputado ya 150 GP y ha ganado la mitad: 76.

"Puede que Rossi sea uno de los grandes, sí", señala Giacomo Agostini, ganador de 122 grandes premios y poseedor de 15 títulos mundiales, "pero nunca hará lo que yo vi hacer al gran Hailwood: ganar carreras en 80cc, 250cc, 350cc y 500cc en el mismo día".Es evidente que lo que ahora intenta Rossi no es novedad, pero empiezan a haber indicios razonables de sospecha de que su noviazgo con Ferrari, que atraviesa momentos de incertidumbre, podría acabar en boda. Todo empezó el 21 de abril del pasado año. Aquel día, con cámaras y demás parafernalia, Rossi probó el Ferrari de Schumi , que le dio la alternativa.Lo del pasado martes y miércoles no fue un juego. Rossi, pese a utilizar en el circuito privado de Ferrari el F-2004 del pasado año, tuvo todo, absolutamente todo, lo que tienen los pilotos de la scuderia cuando van a probar en serio: medios, neumáticos, ingenieros y telemetría de altos vuelos. No es cierto, como señaló la prensa italiana, que se personasen allí Luca di Montezemolo y Jean Todt. El equipo, capitaneado por Ross Brawn, su máximo responsable técnico, llamó expresamente a Marc Gené, su probador de confianza y el hombre que más kilómetros ha hecho con el Ferrari, para que estuviese en las dos jornadas de ensayos.Rossi, que corrió totalmente de rojo, incluído un casco sin marca alguna, realizó diversas series de 10 vueltas, hasta completar más de 150 durante los dos días. Antes y después de cada tanda departió amigablemente con Brawn y Gené, lo que es una prueba palpable de que el ensayo iba en serio.Papá apoya el cambio"Soy favorable a una aproximación de Vale a la F-1", explicó ese mismo día su padre Grazziano Rossi en La Gazetta dello Sport.

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"Soy favorable a una aproximación de Vale a la F-1", Grazziano Rossi "Dudo de que esta prueba que ha realizado con el Ferrari sea un juego, me extrañaría mucho que la scuderia se tomara tan en serio un divertimento. Estoy seguro de que si Vale decide dar el salto a la F-1, lo hará de maravilla, como todo".El programa que Ferrari había preparado para Rossi era muy ambicioso y, aunque se cronometraron todas sus vueltas, nadie dio importancia a los cronos que fueron, dicen, un segundo mejor que el año pasado, quedándose a casi tres segundos del mejor giro de Schumacher.Rossi empezó familiarizándose con la conducción y manejo del bólido, practicó las frenadas y más tarde el pilotaje en curvas rápidas, dos de las diferencias que existen entre una máquina de MotoGP y un bólido de F-1, pues la velocidad punta de ambos es parecida: 340 kms/h.Yamaha, al corrienteRossi acaba de renovar con Yamaha sólo por un año más (2006) para seguir corriendo en MotoGP. "Sólo quería seguir conociendo las sensaciones que produce un F-1 y Ferrari, como ya ocurrió el pasado año, ha tenido la gentileza de ofrecerme esta nueva posibilidad", dijo el doctor .

"Sólo quería seguir conociendo las sensaciones que produce un F-1 y Ferrari, como ya ocurrió el pasado año, ha tenido la gentileza de ofrecerme esta nueva posibilidad", el doctor "He empezado a conocer un poco más esta fabulosa máquina gracias a los consejos de Ross Brawn y Marc Gené. Ahora vuelvo a las motos, todavía tengo mucho trabajo que hacer. Eso sí, me lo he pasado en grande".Es evidente que esa doble prueba es un paso adelante en el romance. Y que la scuderia contempla seriamente la posibilidad de contratar al italiano en el 2007, cuando Schumi ya no esté y tras comprobar el rendimiento del brasileño Felipe Massa, que el año que viene ocupará la plaza que deja Rubens Barrichello. El hecho de que tan sólo haya firmado por una temporada es un indicio.Ferrari quiere tener los dos asientos libres en el 2007 para poderle ofrecer uno a Rossi, que le ha propuesto a Yamaha que le permita escaparse de vez en cuando para seguir probando el Ferrari. "Si las pruebas son como ésta, esporádicas, creo que la propuesta puede estudiarse", ha reconocido Davide Brivio, responsable de la escudería Gauloises-Yamaha.Asesoramiento de GenéMarc Gené se mostró encantado de haber colaborado con el hexacampeón. "Sabía de su simpatía arrolladora y pasé dos días estupendos junto a él", explica.

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"Si las pruebas son como ésta, esporádicas, creo que la propuesta puede estudiarse",

"Sabía de su simpatía arrolladora y pasé dos días estupendos junto a él", "Mi trabajo consistió en asesorarle en el manejo del coche, en su comportamiento y, también, en el aspecto físico al explicarle un par de trucos para que su cuello no sufriese. No es lo mismo pilotar una moto que un coche. Rossi lo sabe e hizo unos ensayos muy buenos".Gené cree que Rossi podría ser un "buen piloto" de F-1. Y no dice más. "Es una esponja; todo lo que le explicas, lo aprende de inmediato y lo pone en practica al segundo". Gené explica que lo más difícil de asimilar para Rossi fue cómo apurar la frenada y trazar las curvas rápidas.Gené explica que donde más se lió Rossi fue a la hora de utilizar la comunicación por radio. "Hombre, es comprensible, pues en las motos eso sólo se ha utilizado de forma experimental, mientras que en la F-1 es vital para dar órdenes, consejos y llevar a cabo la estrategia de carrera". El problema es que Rossi utilizaba su argot y no el vocabulario de la F-1.

"buen piloto" "Es una esponja; todo lo que le explicas, lo aprende de inmediato y lo pone en practica al segundo".

"Hombre, es comprensible, pues en las motos eso sólo se ha utilizado de forma experimental, mientras que en la F-1 es vital para dar órdenes, consejos y llevar a cabo la estrategia de carrera". "La verdad es que los ingenieros y todos nos lo pasamos bomba con sus conversaciones, pues eran las de cualquier joven que alucinaba con las prestaciones del coche".Esa fue la única broma que se permitió Rossi. Y Ferrari.