El Extremadura necesita ganar el derbi ante el Mérida. Por muchas circunstancias. La primera y más importante, la deportiva. El equipo no está alejado de puestos de clasificación para la Liga Pro, pero las sensaciones dentro del campo no son buenas y, desde luego, los puntos en la tabla son menos que los que hubiera deseado el equipo a la vista del presupuesto con el que se ha confeccionado la plantilla.

El Extremadura necesita ganar también para dar calma a la institución, sumida en muchos problemas abiertos y un preconcurso de acreedores del que nada se sabe si tendrá o no solución positiva. Y necesita ganar también para dar calma a una afición que no da crédito a la involución que ha experimentado el club en su último año de vida.

Propósito de enmienda

Por todo ello, José Antonio Ruiz fue muy claro y directo en la previa antes del encuentro ante el Mérida: «necesitamos que el equipo dé un paso adelante. Nadie en el vestuario estuvo a la altura de las circunstancias en Villanueva de la Serena. Estamos convencidos de que eso no volverá a ocurrir y necesitamos una victoria para cerrar esa herida y brindársela a la afición».

Ruiz tiene claro que habrá movimientos en el once inicial. La paupérrima actitud del equipo en el primer tiempo en Villanueva de la Serena demanda cambios y lo sabe el técnico azulgrana. «Después de una derrota, siempre toca mover cosas y buscar soluciones. Vamos a sacar al equipo más competitivo que nosotros entendamos que le vendrá mejor al Extremadura». El técnico almendralejense no habló de nombres, pero se esperan varios cambios en el once.

Uno de los que podría entrar de inicio es Jilmar. El lateral hispano colombiano ya entrena con normalidad después de tres semanas lesionado y volverá al carril izquierda. Más dudosa parece la participación de inicio de Dani Toribio, aunque el centrocampista catalán podría entrar en la convocatoria. Sigue lesionado Sergio Gil.

Sobre el Mérida, Ruiz tiene claro que es un equipo que llega en dinámica positiva después de encadenar siete de los últimos nueve puntos. Apela a la motivación extra que siempre ofrece un derbi entre Extremadura y Mérida y, sobre todo, suspira por un triunfo que asiente la confianza que el club ha depositado en el entrenador.