En términos absolutos, Rusia es la gran triunfadora en estos campeonatos con un total de 24 medallas, seguida de Gran Bretaña con 19 y Francia con 18. Sin embargo, comparativamente con respecto a Gotemburgo 2006, pierde en Barcelona nada menos que 10 medallas, la mayoría a favor de Gran Betraña, que gana 7, y de Francia, que dobla su botín de 9 a 18 metales.
La comparación entre las medallas logradas por hombres y mujeres por separado arroja diferencias tan elevadas que deberían ser dignas de estudio. Mientras las rusas superan por goleada a los atletas masculinos (18 a 6), británicos y franceses rebasan a británicas y francesas por 15 a 4 y 13 a 5, respectivamente.
El progreso del Reino Unido se entiende por la supuesta inversión en el atletismo, y en el deporte en general, que los británicos están haciendo de cara a sus Juegos en Londres. Francia ha recuperado su grandeur atlética gracias a una decidida apuesta por este deporte a través de las escuelas y muy probablemente por su decidida lucha contra el dopaje, aclarando la imagen borrosa que transmite el atletismo en otros países.
