Cuando acabó el Gran Premio de Holanda y Jorge Lorenzo terminó quinto, justo detrás de Dani Pedrosa, Cal Crutchlow, con su desparpajo contagioso, dijo: "Jorge nos ha dejado en evidencia, a ver quién es el guapo que ahora, tras romperse la clavícula, no corre".
La exhibición de Marc Márquez ayer, en el difícil trazado de Sachsenring, donde nadie pudo pararle, ni siquiera las dos poderosas Yamaha de Crutchlow y Valentino Rossi, que intentaron, a su manera, echarle una mano al colega de marca, parece haber dejado en evidencia a Jorge Lorenzo y Dani Pedrosa, que tendrán que decidir en días, en horas, hoy, mañana o, como mucho, el miércoles, si viajan o no a Laguna Seca (California, EEUU), donde, el domingo, se disputará el noveno gran premio del año, el que abre las vacaciones, el que marca el ecuador del Mundial.
Pedrosa ha dejado su residencia en Prangins, cerca de Ginebra, y esta noche ha dormido en casa de mamá, en Castellar del Vallès. Lorenzo olvidó su casa de Lugano (Suiza) y se ha instalado en su mansión de Llavaneras. Los dos grandes favoritos al título de MotoGP están ahora a dos y 11 puntos, respectivamente, del líder y si conceden a Márquez la posibilidad de correr solo en Laguna Seca, puede que se vayan los dos de vacaciones con más de un puñado de puntos en sus clavículas.
El Twitter de Lorenzo
Pedrosa huyó, materialmente, de Sachsenring en cuanto los médicos del trazado alemán le dijeron que, dados sus mareos, su bajada de tensión y su inestabilidad neurológica, no podía correr. Voló a Barcelona antes de la carrera. Nada se sabe de él. Bueno, sí, que hoy acudirá al Instituto Dexeus para que le hagan una nueva revisión y ayudarle a decidir. Eso fue lo que contó ayer, en Sachsenring, el doctor italiano Michele Macchiagodena, responsable de MotoGP, que recomienda a ambos campeones españoles que no viajen a EEUU. "Es muy arriesgado hacerlo. Una caída en ensayos o en carrera, les complicaría mucho su recuperación". Si se paran, tendrán cinco semanas de descanso hasta Indianápolis (18 de agosto) y se curarán del todo.
Pero Márquez se ha puesto al mando y aunque dice que "aprenderse el temible sacacorchos de Laguna Seca en dos días es muy complicado", todos creen que, de no estar Pedrosa y Lorenzo, la ventaja del de Cervera aumentará.
El equipo ya está en EEUU
En Sachsenring todos creían ayer que los lesionados irán a Laguna Seca. Correr es otra cosa. Todos, incluido su equipo que ya está camino de EEUU, pusieron en duda el twittter que el mallorquín colgó ayer: "Para aquellos que me preguntáis si estaré en Laguna Seca, deciros que prefiero no tomar más riesgos, recuperarme bien y volver en el GP de Indianápolis".
El viernes, en el interior del box de Lorenzo, hubo una conversación entre Ramón Forcada y sus mecánicos, desconocedores entonces del estado de su piloto. "Entonces, ¿viajamos o no a Laguna Seca?", preguntó uno de sus chicos a Forcada. "Viajamos. Vosotros sabéis, mejor que nadie, cómo es Jorge. Igual el miércoles se levanta y dice: '¡Voy, viajo, pruebo, corro!' Y todo ha de estar a punto".
