El crecimiento y profesionalización del fútbol femenino es una realidad. El Santa Teresa Badajoz y Femenino Cáceres serán los dos únicos representantes extremeños en la Primera División ‘B’, que nacerá esta próxima temporada y que será el paso previo a la Liga Iberdrola.

«Era un paso necesario para hacer una segunda división de verdad, que pueda acercarnos al nivel deportivo, económico y estructural de los clubes de primera división. El problema de la categoría anterior era el desnivel, que hacía que no llegases preparado a partidos claves», señala Juan Carlos Antúnez, técnico del Santa Teresa.

Y los cambios ya se pueden apreciar en el equipo cacereño. Más profesionales. «Estos años estaba prácticamente solo, para la próxima temporada contaremos con una preparadora física, un delegado y un segundo entrenador», confiesa Ernesto Sánchez, preparador del Femenino Cáceres desde hace varios años.

Los objetivos de ambos clubs están aún por definir. Un territorio desconocido les hace ser prudentes. «Primero debemos ver cuál es el nivel que hay, tenemos que adaptarnos a la categoría. Intentaremos estar lo más arriba posible, pero el presupuesto es humilde», confiesa Sánchez.

«No sabemos ni el nivel, ni el formato, ni las plantillas de los rivales. El grupo será muy duro, habrá 7 equipos peleando por el título. Marcar el objetivo del ascenso sería temerario por nuestra parte», coincide Antúnez. Una categoría formada por dos grupos y con un total de 32 equipos.

CRECIMIENTO REGIONAL / Según un estudio de la UEFA, España es el país donde más rápido está creciendo el fútbol femenino, aunque se encuentra aún en la sexta posición del mundo en cuanto a licencias se refiere. Por otra parte, para el próximo año, la Real Federación Española de Fútbol destinará 20 millones de euros al fútbol femenino.

«Son 20 millones de euros para todas las competiciones de fútbol femenino, es una gran partida. El crecimiento está siendo bastante alto, pero hay que tener paciencia para desarrollarnos. Se están poniendo los cimientos y en los próximos 2 ó 3 años veremos un crecimiento exponencial», reconoce el técnico del Santa Teresa.

En Extremadura, también hay avances. «El miércoles pasado hicimos pruebas para la cantera y tuvimos una respuesta muy buena. Vinieron muchas chicas y eso hace unos años era impensable, cada vez se animan más a jugar al fútbol y es una muy buena noticia», explica el preparador del club cacereño.

No obstante, todavía hay trabajo por hacer. «En Extremadura hay un gran apoyo de las administraciones públicas, pero es cierto que aún se demanda un poquito más de inversión privada. Las empresas tienen que ver el retorno que genera el fútbol femenino, tanto a nivel de imagen como social», reclama Antúnez.