Mes y medio al cargo del club cacereño le dan a José Manuel Santos para tener una idea clara de cómo se está desarrollando la competición liguera en una Tercera División que todos coinciden en definir como muy igualada. Don Benito y Castuera, dos equipos con objetivos y posición en la tabla muy dispares, han sido las dos últimas piedras de choque del Cacereño. Y la sentencia del salmantino es tajante: "No note mucha diferencia entre un equipo y otro".

Sus palabras resumen las sensaciones del grupo XIV. Bajo esta panorámica, Santos es consciente de que su equipo, además de innegables virtudes, cuenta con notables carencias. Pese a mostrarse satisfecho con sus jugadores y, sobre todo, la actitud de éstos, asume que "todo equipo es mejorable". El club verde no es una excepción y su entrenador sabe por dónde sangra la herida: "El Cacereño tiene que ganarse el respeto, tenemos que imponernos por méritos propios".

Mucho se ha dicho sobre la competitividad de este equipo. Santos lo reitera. El ´pero´ está en que "falta tener las ideas claras. Cuando nos han puesto en dificultades no hemos sabido superar los inconvenientes, pero conseguiremos hacerlo".