El alemán Michael Schumacher (Ferrari) dio un paso gigantesco para lograr su sexto Mundial de Fórmula Uno al ganar el Gran Premio de Estados Unidos, en el que el colombiano Juan Pablo Montoya (Williams-BMW), sexto, perdió toda opción y tras el cuál sólo un milagro daría el título al finlandés Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes).

Schumacher fue el mejor una vez más y ganó en Indianápolis, con 18 segundos de ventaja sobre Raikkonen, que fue segundo, y 37 sobre su compatriota el alemán Heinz Harald Frentzen (Sauber), que les acompañó en el podio de una prueba en la que el español Fernando Alonso (Renault) tuvo que abandonar en la cuadragésimocuarta vuelta debido a una rotura de motor.

Schumi mejorará con casi total seguridad el récord que le une al argentino Juan Manuel Fangio --que también ganó cinco mundiales, en la década de los cincuenta-- en la última prueba del campeonato, que se disputará dentro de dos semanas en la pista japonesa de Suzuka.

Sólo una auténtica tragedia apartaría al alemán de conseguir un nuevo título, que únicamente iría a parar a manos de Raikkonen si el finés gana y Schumacher no puntúa en Suzuka. Al alemán le bastaría ser octavo o que el joven piloto de McLaren no ganase el Gran Premio de Japón para celebrar la media docena de títulos.

HOMBRE RECORD

De momento, ayer logró su sexta victoria de la temporada, la septuagésima de su carrera y la 51 desde que está en Ferrari.

Lo hizo con un tiempo de una hora, 33 minutos y poco menos de 36 segundos, rodando a una media de 196.164 kilómetros a la hora --en una jornada en la que su compatriota Frentzen subió de nuevo a un podio que no tocaba desde el año 2000, también en Indianápolis--, en una prueba con muchos cambios; marcada en los prolegómenos por lo incierto de la meteorología y en el que la elección de neumáticos jugó un papel clave.

Y como quiera que acabó lloviendo durante algo más de quince vueltas, los Bridgestone demostraron que en estas condiciones son superiores al otro suministrador del mundial, Michelín, que funciona a la perfección en seco y más aún cuando las temperaturas suben.

Raikkonen, que había logrado la pole el sábado, salió bien, al igual que Schumacher, que ganó tres puestos y encauzó una nueva carrera exitosa.