El Comité de Competición ha decidido que la segunda parte del Rayo Vallecano-Albacete de la Segunda División española se dispute a puerta cerrada. El partido del pasado 15 de diciembre fue suspendido por los cánticos de «puto nazi» dirigidos al jugador del Albacete, Roman Zozulia.

El colegiado del encuentro optó por suspender el partido y el Comité de Competición ha dictaminado que se juegue la segunda parte sin público. No obstante, por ahora no se ha hecho oficial ni la hora ni el día.

Además, el Rayo ha sido sancionado con una multa económica de 18.000 euros por los insultos de los ‘Bukaneros’ a Zozulia y la grada de los hinchas ultras del Rayo deberá permanecer cerrada durante dos encuentros.

Está por ver si el Rayo decide recurrir la decisión del Comité de Competición y si hay otras sanciones más allá de las comentadas anteriormente.

Raúl Martín Presa, presidente del Rayo, mostró su «rotundo desacuerdo con la resolución» y con los 18.000 euros de multa impuestos al club. «La consideramos completamente injusta. Esta sanción al Rayo trasciende la jurisprudencia y el ordenamiento jurídico español porque el club es una víctima, no un culpable», dijo.

«La exigencia de culpabilidad de una persona jurídica es indispensable para una sanción. Cada uno responde de sus propios actos, sin que se establezca responsabilidad alguna por actos ajenos. Por eso me parece una atrocidad sancionar al Rayo con 18.000 euros por hechos en los que el club no tuvo responsabilidad alguna, sino que no pudo evitar poniendo los medios a su alcance», señaló. Para Martín Presa, con esta sanción «se culpabiliza al Rayo por actos que han hecho otras personas ajenas al club».

El encuentro Rayo-Albacete es el primero de la Liga suspendido por incidentes de público.