Los excéntricos Mattia Pasini (125cc) y Jorge Lorenzo (250cc), ambos con Aprilia, dominaron ayer a su manera, con autoridad y gracejo ("en Italia me quieren más que en España, ¡perdón, perdón!, me comprenden mejor", comentó el joven mallorquín), los primeros ensayos del Gran Premio de China de mañana (5.00 horas, TVE-1) en el lujoso trazado de Shanghái. Y lo hicieron superando casi por medio segundo a sus más directos rivales, Lukas Pesek y Julián Simón.

Medio segundo es ya un mundo en MotoGP, pues es la distancia en la que, de momento, está metida media parrilla de la categoría reina. Entre los 14 primeros, de John Hopkins (Suzuki, 2.01.204 minutos) a Toni Elías (14º, Honda, 2.02.114), solo hay un segundo. O menos, 910 milésimas.

Los hay que ven el dato como maravilloso, como síntoma de la vitalidad de la categoría, y quienes lo interpretan como la vulgarización del pilotaje. "¿Que qué me parece?", se preguntó Valentino Rossi. "Pues muy sencillo --se respondió él mismo-- , que estas motos son ya tan fáciles de pilotar que cualquiera puede conducirlas al límite".

Es evidente que los primeros ensayos de Shanghái demuestran que la diferencia ya no solo la marca el piloto (Rossi fue ayer sexto; Dani Pedrosa, tercero, y Casey Stoner, líder del Mundial, octavo), sino la potencia del motor (las Ducati corren infinitamente más que las demás) y los neumáticos, que se han convertido en una auténtica lotería y un rompecabezas.

Ese segundo, plasmado en una jornada vivida entre la niebla y el esmog (si Shanghái está así, a saber cómo estará Pekin durante los Juegos Olímpicos), permite intuir una carrera divertida para la próxima madrugada. No es este un circuito de pilotaje. "Tiene tres interminables rectas, frenadas cortas y poco problemáticas, curvas muy cerradas y es largo, muy largo, así que es pan comido", explica con su sinceridad habitual el veterano Carlos Checa (Honda, décimo).

Pasemos a la potencia. Mientras Honda distribuye el tope de revoluciones de sus motores a su antojo (ni Hayden, ni Pedrosa, ni Melandri, ni Elías, ni Checa tienen las mismas, y han de ganarse su inyección con resultados), los demás temen por el consumo, cosa que parece haber solucionado Ducati con algún truquito a la italiana. Así que las Ducati de Capirossi (326,2 km/h), Stoner (326,1) y Barros (325,1) fueron las más rápidas. "Han hecho el mejor anuncio posible: fulminarán en la recta a todo el que se ponga por delante", aseguró.

Pedro Martínez de la Rosa, colega de Fernando Alonso en McLaren, suele decir que el secreto de una victoria está en los neumáticos. "La diferencia entre uno bueno y otro malo es casi de un segundo" .