Tras haber tocado fondo en los Juegos Olímpicos de Londres del pasado verano (sin medallas y con solo cuatro finalistas), el atletismo español intentará comenzar una nueva etapa en los Europeos.

Con el mismo presidente (José María Odriozola acaba de ser reelegido hasta el 2016, cuando cumplirá 27 años en el cargo), con un nuevo seleccionador (el extriplista Ramón Cid es el primer director técnico en la era Odriozola) y un equipo renovado de 26 atletas (18 hombres y 8 mujeres), de los cuales muchos son debutantes y ocho acuden sin haber acreditado la marca mínima, España buscará una difícil remontada en el Scandinavium Arena, un pabellón capaz para 12.000 espectadores que vibrarán con muchas cosas, pero raramente con medallas españolas.

Las opciones son limitadas. Ayer, el tercer mejor velocista continental del invierno, Angel David Rodríguez, se resintió de su microrrotura en el abductor izquierdo y no podrá correr. El Pájaro había corrido este año tres veces por debajo de los 6.60 segundos en los 60 metros y podía plantar cara al joven italiano Michael Tumi y al inglés Dwain Chambers para intentar ser el primer finalista español en la distancia desde José Javier Arques (Madrid 1986).

Una posibilidad menos de medalla, que también se complican en los habituales caladeros del atletismo español, las pruebas de mediofondo, donde se ha producido una proliferación de atletas nacionalizados. Es el caso, según explicó ayer Ramón Cid, de la etíope Abeba Aregawi, líder del ránking de 1.500 metros (3.58.40) y principal adversaria de Natalia Rodríguez, que por cierto correrá con una pequeña contractura en un gemelo. "Del verano acá la han hecho sueca", aseguró Cid de Aregawi. Francia cuenta con Mahiédine Mekhissi, de origen argelino, en 1.500 metros masculinos, y Azerbaiyán, con Hayle Ibrahimov, nacido en Etiopía, en 3.000 metros. Distancias en las que España cuenta con posibilidades a través del mallorquín David Bustos (bronce en los Europeos al aire libre de Helsinki del año pasado) y del renacido Juan Carlos Higuero, que a sus 34 años debutará en el 3.000 tras haber sido campeón europeo en sala en 1.500 hace seis años.

Las cuatro medallas y los 11 puestos de finalistas (ocho primeros) logrados en los últimos campeonatos continentales bajo techo, en el año 2011 en París, serán la referencia para el renovado equipo español.