En lo que se lleva de competición, la gran asignatura pendiente del Mérida son los partidos a domicilio, ya que todavía no conoce la victoria fuera del Romano. Desde que está Eloy Jiménez en el banquillo el balance es de un empate y una derrota. Antes, cuando el inquilino era José Miguel Campos, los números eran aún peores con cuatro derrotas consecutivas a domicilio.

Ya es sabido que el mal arranque liguero ha provocado que el Mérida haya estado demasiado tiempo situado en los puestos de descenso directo, sin embargo, este grupo IV es tan igualado, que consiguiendo una racha positiva más o menos regular, pronto se puede empezar a mirar hacia arriba. En este sentido, el Mérida no ha hecho un mes de octubre espectacular, con dos derrotas, dos victorias y un empate, pero parece que puede servir como rampa de lanzamiento para un mes de noviembre, que también va a tener cinco encuentros, y que ha empezado con la victoria del miércoles pasado frente al Jumilla. Se da la circunstancia de que los emeritenses, tras la derrota en Villanueva de la Serena, estaban hundidos en el descenso, y solo dos jornadas después, si ganan hoy al Linense (17.00 horas) y se dan una serie de resultados, podrían acercarse a seis puntos del cuarto.

Realmente, la situación en la tabla en noviembre no es más que una anécdota, pero al analizar un poco el calendario y los resultados obtenidos, se puede llegar a tres conclusiones muy claras: La primera es que el Mérida parece que ya ha salido de la profunda depresión en la que se encontraba. La segunda sería que el Romano, con cuatro victorias (las tres últimas consecutivas), un empate y una derrota, se ha convertido en un fortín. Y la tercera es que al Mérida, sólo con los partidos de casa no le da para mirar hacia arriba, por eso los tres puntos de hoy son tan importantes, porque la derrota supondría volver a hacer indispensable ganar la semana que viene en casa frente al Recreativo de Huelva.

SIN BAJAS / De nuevo Eloy Jiménez cuenta con toda su plantilla. Ha descartado a Álex Diez y Ayoze, lo que indica que volverá a utilizar la línea defensiva del miércoles pasado con Aguza y Mongil en el eje de la zaga.

Tras el partido de entresemana, la mayor preocupación del entrenador emeritense es que sus jugadores estén frescos, por lo que podría hacer bastantes variaciones. La primera podría llegar en el propio dibujo táctico volviendo al 4-3-3 que siempre ha utilizado en los partidos de fuera. Eloy podría darle descanso a Javi Chino y colocar a Pardo por delante de los centrales con Antonio Romero y Borja como interiores. En punta, el que descansaría sería Yacine, por lo que utilizaría a Hugo Díaz como delantero, con Hugo Rodríguez y José Ramón en banda.

Enfrente estará la Real Balompédica Linense, que tras un arranque dubitativo, también está en línea ascendente como el Mérida, situado noveno en la tabla con tres puntos más que los romanos. Llega con una racha de ocho partidos sin perder, merced a tres victorias (dos de ellas en casa) y cinco empates. Los jugadores se van a encontrar con un nuevo césped natural en muy buen estado. El propio Eloy Jiménez destaca de su rival que «es un equipo muy rápido de medio campo hacia delante, con jugadores de calidad que están con mucha confianza», aunque «lo más importante somos nosotros mismos». H